CARACAS.- El director general de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento, investiga la supuesta infiltración de efectivos de la Guardia Nacional de Venezuela en el campamento humanitario en Bogotá, al cual fueron trasladados casi 400 migrantes venezolanos de manera temporal.
“Hemos recibido información de diferentes fuentes sobre la posible presencia de venezolanos que buscan desestabilizar o afectar el orden social con el único propósito de deslegitimar la labor humanitaria que se viene adelantando”, dijo Krüger Sarmiento.
La información preliminar apunta a la presencia de miembros de la GNB y colectivos de Venezuela en los incidentes que se registraron el 19 de noviembre en el campamento “El Camino”.
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Ese día, un grupo de venezolanos reubicados se enfrentaron entre ellos y con la Policía por la repartición de alimentos.
Tras este hecho, fueron detenidos 16 venezolanos, uno de ellos menor de edad, que fue puesto bajo la tutela del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF); otros 15 fueron expulsados del país.
“No permitiremos que unos cuantos dañen todo el trabajo que se viene adelantando para asistir al pueblo venezolano que lo necesita”, advirtió Krüger.
Esclavas sexuales
Las autoridades colombianas rescataron a 40 venezolanas que eran obligadas a prestar servicios sexuales en tres establecimientos nocturnos de Bogotá.
Luego de una redada en el barrio Santa Fe, fueron detenidas 144 personas, entre ellas cinco venezolanos, que hacían parte de 18 bandas criminales.
Las labores de inteligencia para dar con los delincuentes duraron tres meses.
Las mujeres fueron obligadas a prostituirse por 20 días para compensar el transporte hacia la capital; y al día solo podían tener 15 minutos de libertad, según detalló el fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez.
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Con información de EFE
