CARACAS.- Adrían Velásquez Figueroa, exjefe de seguridad de Hugo Chávez, será extraditado a Venezuela por las autoridades españolas.
El argumento empleado por su defensa para detener el proceso no convenció a la Audiencia Nacional de España, que consideró que Velásquez Figueroa no puede considerarse “perseguido político”, porque fue miembro de la administración de Chávez y no un opositor a este.
El señalado es requerido por Venezuela por los delitos de blanqueo y enriquecimiento ilícito, a raíz de la publicación de los “papeles de Panamá”, en los que aparecen empresas relacionadas con su persona y con las que, según funcionarios venezolanos, lavaron dinero sustraído de las arcas públicas.
Sus abogados también argumentaron que era una “temeridad” entregarle, en vista de que Venezuela es “un país donde se violan constantemente los Derechos Humanos”.
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A esto, le añadieron que tras la muerte de Chávez y la ascensión de Maduro al poder, “se persigue a todos los miembros de la anterior Administración por el simple hecho de no alinearse con el nuevo Gobierno”.
La justicia española replicó que, si bien Nicolás Maduro está denunciado por organismos internacionales de vulnerar los derechos, “es claro es que la persecución política está orientada hacia opositores del régimen, no contra miembros de la Administración en tiempos de Chávez por el mero hecho de haber formado parte de la misma, porque el actual Gobierno es continuista con esa Administración y el propio Maduro fue vicepresidente de de Chávez”.
Misma suerte corrió la esposa de Velásquez, Claudia Patricia Díaz Guillén, enfermera personal de Chávez y tesorera de la República, quien recurrió la decisión de extradición por motivos similares que su marido y pedirá asilo en la nación ibérica.
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Con información de EFE
