Las causas más conocidas para presentar mal aliento reposan en tabaquismo, alcoholismo o consumo excesivo de ciertos alimentos como cebolla, ajo y café. Sin embargo, hay otras razones como placa bacteriana, gingivitis o periodontitis que sin la ayuda de un especialista son difíciles de detectar.
Por otro lado, un gastroenterólogo también puede ayudar cuando el problema radica en el estómago a causa de un reflujo estomacal.
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Causas poco conocidas del mal aliento
Muchas veces las personas asocian mal aliento a un lavado dental erróneo, falta de higiene bucal o enfermedades en la boca. No obstante, el origen del mal aliento no siempre está situado en la boca.
La gastroenteróloga, Aline Carboni Casado, compartió por medio de su cuenta de Instagram varias razones que no todos conocen sobre el mal aliento.
Alimentos acumulados en la amígdala
También conocido como cassis amigdalar o caserum. Se trata de masas amarillentas o blancuzcas que se forman gracias a residuos alimenticios que logran acumularse en la zona de las amígdalas. Dichas masas poseen un fuerte y desagradable olor.
Sinusitis
Es posible que las bacterias se alimenten de las secreciones que vienen del seno en el rostro y esto puede causar mal aliento porque las fosas nasales están obstruidas y la persona solo puede respirar por la boca provocando resequedad y saburra lingual.
Carencia de saliva
De acuerdo con el portal WebMD, existe una condición denominada xerostomía que aparece cuando la boca se reseca y puede producir mal aliento.
¿Por qué? Ciertamente la saliva es necesaria para neutralizar los ácidos que causa la placa, humedecer la boca y retirar las células muertas que se acumulan en la lengua, mejillas y encías. No obstante, cuando hay carencia de saliva las células se pueden descomponer en la boca y generar el molesto mal aliento.