Hacer palitos de mozzarella no es complicado, así que si deseas comerlos sin tener que salir de casa solo tienes que animarte a conseguir los ingredientes y seguir las indicaciones de la receta.
Sabemos que no todos los gustos son iguales, por eso, traemos dos opciones deliciosas para hacer palitos de mozzarella horneados o fritos. Tú decides la forma en que prefieres saborearlos, pero eso sí, con las dos alternativas obtienes unos dedos de queso súper crujientes y exquisitos.
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Esta preparación es fabulosa para compartir en fiestas, eventos o celebraciones pequeñas en casa y puede estar acompañada de una gran cantidad de salsas deliciosas que elevan el sabor de los palitos de mozzarella.
Saca tu habilidades culinarias y destácate en la cocina para que impresiones a tus invitados o familiares con un alimento distinto, sabroso y sencillo de realizar. ¡Ponte, manos a la obra!
2 formas sencillas de hacer palitos de mozzarella
Horneados
Reúne los siguientes ingredientes:
- 2 cucharadas de harina de trigo
- 12 trozos de queso mozzarella
- 5 cucharadas de pan rallado
- 2 cucharadas de queso parmesano
- 1 huevo
- Aceite en aerosol o mantequilla
Modo de preparación:
Inicia precalentando el horno a una temperatura de 220°C y cubre una bandeja ideal para el horno con aceite o engrasa con un poco de mantequilla. Luego, mezcla el pan rallado con el queso parmesano y no te detengas hasta conseguir una preparación uniforme. Después, coloca cada uno sobre un plato limpio.
Pon en otro recipiente el huevo y bátelo para luego colocar harina en un tercer plato o recipiente. Posteriormente, agarra los palitos de mozzarella, pásalos por la harina, luego sumérgelos en huevo y finalmente en pan rallado y queso parmesano.
Fritos
Necesitas de:
- 1/3 taza de harina de trigo
- 250 gramos de queso mozzarella
- 1/8 taza de almidón de maíz (maicena)
- 1 taza de migas de pan
- Orégano al gusto
- 1/2 cucharada de sal
- 1 huevo
- Aceite para freír
Elaboración:
El proceso es bastante sencillo y muy similar al anterior. Comienza precalentando el aceite en una sartén y deja que llegue a una temperatura ideal para freír cada palito de mozzarella sin inconveniente.
Busca dos platos, en uno coloca la harina mezclada con la maicena y en otro el huevo batido. En un tercer recipiente coloca las migas de pan con sal y orégano. Luego, corta el queso en rectángulos y asegúrate de darle un tamaña similar a todos. Acto seguido, pasa por la harina, después por el huevo y por último las migas de pan. Fríe y saca cuando estén dorados.