El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo la muerte del líder y fundador del Estado Islámico (EI), Al Bagdadi, en una operación militar de su país en el noroeste de Siria.
“Abu Bakr Al Bagdadi está muerto”, informó Trump en una declaración a la nación desde la Casa Blanca.
Trump agregó que “anoche Estados Unidos hizo justicia con el terrorista número uno del mundo”.
Según el mandatario, Al Bagdadi se suicidó con un cinturón de explosivos al final de un túnel tras ser perseguido durante la acción de los comandos estadounidenses: “Murió como un perro, como un cobarde”.
Sin embargo, la versión otorgada por el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) sostiene que la operación inició con unos helicópteros que atacaron una vivienda y un auto a las afueras de la localidad de Barisha.
Además, alertaron que en la operación murieron presuntamente nueve personas.
De igual forma, algunos medios estadounidenses ya habían citado más temprano fuentes del gobierno que afirmaron el suicidio de Al Bagdadi con un chaleco de explosivos.
Trump felicitó a las fuerzas especiales y los servicios de inteligencia estadounidenses por una “operación muy, muy peligrosa”.
El mandatario agradeció, asimismo, la colaboración de Turquía, Rusia, Siria, Irak y los kurdos para localizar al jefe del EI.
En ese sentido, Turquía aseguró este domingo que Ankara y Washington compartieron información para ejecutar la operación.
“Antes de la operación estadounidense la noche pasada en la provincia siria de Idlib, hubo intercambio de información y coordinación entre las autoridades militares de ambos países”, dijo el ministerio de Defensa en un tweet sin dar mayores detalles.
A esta declaración sobre la “operación histórica” se unió en celebración el comandante de las fuerzas kurdas en Siria, Mazlum Abdi.
Aunque en su momento no confirmó la muerte de Al Bagdadi, Abdi aseguró que esta fue realizada por un trabajo conjunto de inteligencia con Estados Unidos.
EFE/AP/AMÉRICA DIGITAL