El presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, aseguró este jueves en Washington que la gira internacional que emprendió el 19 de enero demuestra que lograron “derrotar políticamente” a Nicolás Maduro.
Está previsto que en las próximas horas arribe a su país, y desde ya Estados Unidos advierte que monitorea que el regreso se desarrolle con total normalidad, en vista de la prohibición de salida dictada por el cuestiono Tribunal Supremo de Justicia.
“Está llegando al final nuestra gira internacional, una gira que manifiesta primero que Venezuela resistió, que logramos derrotar políticamente a la dictadura de Maduro, que logramos derrotar no solamente políticamente sino también en respaldo, en apoyo de la ciudadanía y también del mundo”, declaró Guaidó a su salida de un encuentro con el secretario general de la OEA, Luis Almagro.
Para Guaidó, con este periplo lograron derrotar “a un dictador que se ampara en terroristas, y además ha servido para “buscar tomar acciones”, entre ellas denominar el oro venezolano como “oro de sangre” debido a la destrucción del Amazonas y otros delitos asociados a su explotación.
El también jefe del Parlamento advierte que el cambio en el país caribeño “es inevitable”.
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Almagro aclaró que queda “mucho trabajo para recuperar la democracia en Venezuela”, las instituciones y la “más plena vigencia de los derechos humanos”.
El líder opositor se entrevistó previamente con el jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, quien prometió que “redoblará esfuerzos” para ayudar a los venezolanos.
Asimismo, conversó con la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien aseguró que la crisis venezolana “le preocupa profundamente” por lo cual los demócratas de la Cámara de Representantes aprobaron un proyecto legislativo para otorgar a los venezolanos que viven en EE.UU. un permiso especial.
Hasta ahora, Trump se niega a apoyar ese plan y la iniciativa que aprobó la Cámara Baja se encuentra estancada en el Senado, en poder del Partido Republicano.