En un empobrecido zoológico en la capital de Sudán, los pocos leones que siguen ahí mueren de hambre en recintos oxidados, con sus costillas sobresaliendo, los ojos vidriosos y la piel flácida, desesperados por agua y alimento.
Las perturbadoras imágenes, compartidas en redes sociales por defensores locales de derechos de animales, provocaron respuestas apasionadas de miles de personas en el mundo. Sin embargo, no fue suficiente para rescatar a dos leonas en el zoológico de Jartum, dijo el activista Zuhair al-Sarag.
“Esto en realidad es un crimen, en el parque alguna vez abundaba en animales y se debe responsabilizar a alguien”, indicó al-Sarag.
Debido a que los empleados del desahuciado Parque Al-Qurashi, como se conoce el zoo de Jartum, no han podido alimentar y cuidar a los animales, muchos han muerto o han sido desalojados, quedando atrás sólo tres leones esqueléticos, incluida una leona.
Recientemente, residente preocupados por el destino de los félinos se juntaron para ayudar, y llevaron alimentos y artículos médicos, a pesar de la crisis económica por la que atraviesa el país.
Los desorbitantes precios de la comida en Sudán provocaron un enorme movimiento de protesta el año pasado que convulsionó al gran país africano y, finalmente, derrocó al autócrata de mucho tiempo Omar al-Bashir en abril.
En ese sentido, el aumento de precios y la adversidad económica que atraviesa el país también han provocado que sufran los animales.
“Muchas organizaciones internacionales están dispuestas a ayudar a los leones, incluso un grupo de rescate que está por llegar a Sudán” dijo Osman Mohamed Salih, el primer activista que pidió ayuda en internet.
Aunque muchos en el extranjero han intentado donar a través de sitios de financiamiento en masas, Salih señaló que las sanciones estadounidenses en Sudán han evitado que el zoo reciba fondos de plataformas populares, como GoFundMe.
Compleja situación
Uno de los cinco leones africanos enfermos y desnutridos en cautiverio del zoológico de Jartum murió el pasado lunes, según indicó un funcionario, en tanto circulan muchos llamados en las redes sociales sudanesas para intentar salvar a estos grandes felinos.
La leona, que fue alimentada mediante sonda y perfusión durante varios días, murió tras una gran lucha por sobrevivir, explicó Issameddin Hajjar, empleado del parque Al Qureshi, donde los animales sufren desde hace varias semanas por la falta de alimentos y medicinas.
“Una de las dos leonas enfermas murió (…) el veterinario les dio medicamentos y luego fueron alimentadas. La salud de una de ellas mejoró, pero la otra murió. Estamos estableciendo un diagnóstico para determinar las causas de este deceso”, indicó Hajjar.
Según los responsables del parque, el estado de salud de los cinco animales se deterioró en las últimas semanas y algunos de ellos han perdido hasta dos tercios de su masa corporal.
Una campaña con el hashtag #Sudananimalrescue se volvió viral en la red internauta Facebook, atrayendo al zoológico a numerosos ciudadanos, voluntarios y periodistas.
El número de leones que hay actualmente en Sudán se desconoce, pero varios de ellos se concentran en el parque de Dinder, ubicado en la frontera con Etiopía.
Los leones son una especie “vulnerable”, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Su población en África ha descendido un 43% entre 1993 y 2014, y se calcula que sólo sobreviven unos 20.000 ejemplares en la actualidad.