La Organización Meteorológica Mundial (OMM) reveló a través de un informe que es posible que a futuro el COVID-19 se convierta en un virus estacional, aunque en la actualidad no lo es, los expertos consideran que las condiciones del clima y la calidad del aire podrían ayudar a controlar su transmisión.
Así lo estableció la OMM en el primer informe sobre la influencia de factores meteorológicos y atmosféricos en el COVID-19, elaborado por un panel de 16 expertos que destacan que por ahora las oleadas de coronavirus se han visto más influidas por causas no climáticas, como las medidas de salud pública o las restricciones de movimiento.
Los expertos destacaron que las infecciones virales respiratorias suelen estar regidas por algún tipo de estacionalidad, especialmente durante el otoño y el inverno en el caso de la gripe y de los coronavirus que provocan resfriados en los países con climas templados.
Este escenario ha llevado a los científicos a pensar que el COVID-19 termine siendo una enfermedad o un virus estacional si persiste durante varios años en el planeta.
“Los estudios de laboratorio sobre el virus que causa el COVID-19, han aportado algunos indicios que apuntan a una mayor supervivencia del virus en condiciones frías, secas y de baja radiación ultravioleta”, reseña el informe de la OMM.
Sin embargo, los expertos reconocen que aún no se ha establecido si las influencias meteorológicas directas en el virus inciden de forma significativa en las tasas de transmisión en condiciones reales en los territorios.
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De esta forma, los expertos aseguraron que en las actuales circunstancias los gobiernos no se pueden basar en los factores meteorológicos o de calidad de aire para relajar las medidas de lucha contra la pandemia.
Los investigadores del estudio también subrayaron que en el año de pandemia se han observado oleadas de contagios en todo tipo de condiciones, incluyendo estaciones de clima templado y cálido, pese a que otras enfermedades respiratorias como la gripe suelen ser más virulentas en meses invernales.
Asimismo, concluyeron que hay algunas evidencias de que el coronavirus es más mortal en épocas de alta contaminación atmosférica, aunque no hay pruebas concluyentes de que la polución aumente el contagio de COVID-19.
“Es posible que exista una combinación de repercusiones directas en la supervivencia del virus, efectos en la resistencia de los seres humanos a la infección y una influencia indirecta de los factores meteorológicos y estacionales que se manifiesta en forma de cambios en la conducta de las personas”, reseña el informe.
¿Virus endémico?
La comunidad científica ha advertido que cada vez es más probable que el COVID-19 se convierta en un virus endémico en humanos, en algunos animales o en ambos; es decir que no desaparezca con las vacunas.
El alto nivel de contagio entre la población y las mutaciones del virus podría hacer que este escenario sea cada vez más probable y que el COVID-19 se convierta en otro virus endémico y que suponga un nivel muy bajo de amenaza en el contexto de un programa mundial de vacunación.
“La existencia de una vacuna, incluso de alta eficacia, no es garantía de la eliminación o de la erradicación de una enfermedad infecciosa», indicó Ryan durante una conferencia en 2020.
Los expertos de la Organización ya habían comentado que existía la posibilidad de que el coronavirus se convirtiera en endémico, una predicción que se está reforzando a la luz de lo que se ha aprendido sobre este virus desde entonces.
A pesar de que este escenario genera cierto temor, la comunidad científica ha resaltado que las vacunaciones permitirán controlar las propagaciones del virus y reducir su incidencia en la salud pública por lo que los países podrían volver gradualmente a la normalidad.
Finalmente, los investigadores de la OMM resaltaron que los estudios preliminares prevén que, con el paso del tiempo, la transmisión del COVID-19 puede adquirir un carácter estacional, por lo que los factores meteorológicos y de la calidad del aire pueden contribuir al monitoreo y a la predicción del comportamiento del virus en los próximos meses y años.
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