La farmacéutica Pfizer y la compañía biotecnológica BioNTech aumentaron a un 95 % la efectividad de su vacuna para el coronavirus luego de concluir los análisis del estudio de fase 3 confirmando que cumplió con todos los criterios de eficacia y seguridad.
“El estudio de fase 3 en curso para nuestro candidato a vacuna COVID-19 ha cumplido con todos sus criterios de valoración principales de eficacia. El análisis de los datos muestra que la vacuna candidata fue eficaz para ayudar a prevenir el COVID-19 con un perfil de seguridad general favorable”, indicó Pfizer.
De acuerdo con la farmacéutica estadounidense, los análisis y pruebas clínicas con más de 43.000 personas permitieron establecer una eficacia de la vacuna contra el coronavirus en diferentes edades, género, raza y etnia tras la aplicación de la primera y segunda dosis.
Asimismo, se logró establecer algunos efectos adversos que pueden ser manejados y que no se presentan en todas las personas como fatiga y dolor de cabeza.
Sin embargo, los adultos mayores registraron efectos más leves y menores después de la vacunación y se mantuvo una efectividad superior al 94 % en personas de más de 64 años.
Tras estos prometedores resultados de eficacia y seguridad, las compañías esperan presentar en los próximos días una autorización de uso de emergencia para su vacuna contra el coronavirus ante la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA).
El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, indicó que esperan realizar este proceso lo más pronto posible ante las autoridades sanitarias ya que miles de personas siguen infectándose todos los días con COVID-19 y el mundo requiere una vacuna contra el coronavirus segura y eficaz cuanto antes.
“Los resultados del estudio marcan un paso importante en este histórico viaje de ocho meses para presentar una vacuna capaz de ayudar a poner fin a esta devastadora pandemia. Seguimos avanzando a la velocidad de la ciencia para recopilar todos los datos y compartirlos con los reguladores de todo el mundo ”, destacó Bourla.
Los resultados
Las compañías iniciaron los ensayos clínicos de fase 3 el pasado 27 de julio con más de 43,600 participantes en países como Estados Unidos, Alemania, Turquía, Sudáfrica, Brasil y Argentina.
En ese sentido, unos 41.135 ya habían recibido una segunda dosis de la vacuna para el coronavirus hasta el pasado 13 de noviembre sin que se presentaran efectos adversos de gran consideración entre la primera y segunda dosis.
El CEO y cofundador de la compañía biotecnológica alemana BioNTech, Ugur Sahin, destacó que estos resultados demuestran que se puede lograr una buena protección contra el COVID-19 con la primera dosis.
“Estamos agradecidos de que el primer ensayo global en alcanzar la marca final de análisis de eficacia indica que se puede lograr una alta tasa de protección contra COVID-19 muy rápidamente después de la primera dosis , lo que subraya el poder de la vacuna BNT162 para brindar protección temprana”, destacó Sahin.
Ver más: La vacuna de Pfizer contra el COVID-19 utiliza una técnica nunca antes probada
Precisamente, esta vacuna contra el COVID-19 fue desarrollada bajo una nueva técnica que nunca había sido utilizada en el desarrollo de vacunas denominado como ARN mensajero, el cual permite un desarrollo más rápido ya que no requiere cultivar un patógeno en un laboratorio.
La técnica consiste en que la vacuna está basada en un material genético de la proteína “pico” del COVID-19 la cual es detectada por el sistema inmunológico para producir anticuerpos frente a la enfermedad.
“Es un tipo de vacuna que le da a las células del cuerpo instrucciones para producir proteínas virales que pueden ser reconocidas por el sistema inmunológico. Contiene una pequeña parte del código genético de la proteína de pico COVID-19 la cual genera una respuesta del sistema inmunológico al detectar la presencia del virus”, explicó Pfizer.
Las compañías han asegurado que esperan producir a nivel mundial hasta 50 millones de dosis de estas vacunas para el coronavirus en 2020 y hasta 1.300 millones de dosis para fines de 2021.
Sin embargo, uno de los retos estarán relacionados con la cadena de frío que requiere estas vacunas ya que se necesita mantenerlas a – 70° centígrados, lo que puede suponer un importante trabajo logístico para su distribución en el mundo.
Ante este escenario, las empresas desarrollaron transportadores térmicos que utilizan hielo seco para mantener estas condiciones de temperatura de -70 ° centígrados, los cuales se pueden utilizar como unidades de almacenamiento temporal para las vacunas.
“Cada remitente contiene un sensor térmico con GPS para rastrear la ubicación y la temperatura de cada envío de vacuna a través de sus rutas preestablecidas aprovechando la amplia red de distribución de Pfizer”, concluyeron las compañías.
Infórmate minuto a minuto sobre esta y otras noticias del mundo en nuestras redes sociales