Bares cerrados y calles vacías: los europeos se encierran para frenar la segunda ola de la pandemia

La gente camina por los jardines vacíos de las Tullerías, en París. Foto: AP

A partir de este sábado 17 de octubre entró en vigor en toda Europa una serie de drásticas medidas para frenar la segunda ola de la pandemia de la COVID-19.

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En varios lugares ya se pueden observar calles vacías, bares nuevamente cerrados, las visitas de amigos están restringidas y aquellos que puedan trabajar desde la casa se les recomienda hacerlo.

Según informan medios especializados, las nuevas infecciones han aumentado un 44% en el continente europeo, en contraste a la disminución de contagios que se han presentado en América Latina, Medio Oriente y Asia.

La OMS expresó su preocupación frente a la situación en Europa, que acumula más de 248.000 muertes y casi 7,2 millones de contagios.

Medidas para frenar la segunda ola

En Francia, entró en vigor el toque de queda decretado por el gobierno entre las 9pm y las 6am en distintas zonas del país, incluyendo su capital, París, situación que afecta a unas 20 millones de personas.

Ante la situación, muchos propietarios de restaurantes y otros establecimientos expresaron su molestia por el golpe económico que sufrirán sus negocios.

“Cerrar a las 21h00 no tendrá ningún efecto (sobre el virus). No lo están atacando de la manera correcta”, dijo Gerard, gerente de un restaurante de Toulouse.

No obstante, el gobierno francés argumenta que es necesario actuar para evitar el colapso de los hospitales en todo el país.

Por su parte, el Reino Unido, país que tiene 43.400 muertos, ha establecido distintas medidas para evitar los alarmantes fallecimientos que alcanzaron la mitad de la población de Inglaterra. 

Las reuniones familiares, de amigos que no viven bajo el mismo techo quedaron prohibidas en Londres y en distintas zonas del país. 

En Alemania, las autoridades le pidieron a la ciudadanía ‘olvidar’ los viajes que no son necesarios.  “Lo que sucederá en invierno, lo que sucederá en Navidad, se decidirá en los días y semanas venideros”, expresó la canciller alemana Angela Merkel.

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Mientras tanto Italia volvió a cerrar sus bares, restaurantes y suspendió todos los eventos deportivos que estaban programados. 

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