El incendio del motor de un avión 777 de Boeing mientras sobrevolaba Colorado (EE.UU.) se presentó tras varios años de una eficacia probada de este propulsor, pero representa un nuevo golpe para la credibilidad de la compañía aeronáutica que no deja de acumular reveses en los últimos años.
Los 231 pasajeros y 10 tripulantes del vuelo 328 de United Airlines, que cubría la ruta entre Denver y Honolulu, vivieron verdaderos momentos de terror luego de que la aeronave presentara fallas en su motor derecho provocando un gran incendio y desprendiendo desechos en el aire que los obligó a aterrizar de emergencia.
Precisamente, los residentes del suburbio de Broomfield, en Denver, encontraron grandes piezas del avión esparcidas por su vecindario, incluida una pieza circular gigante de metal que aterrizó en el patio de un vecino.
De acuerdo con la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de EE.UU. (NTSB), durante el hecho se registró el desprendimiento de una parte de la carcasa que rodea el motor, rompiéndose varias palas del enorme ventilador que aspira aire hacia el interior del reactor.
“Los fallos de motor nunca se evitarán y se resuelven”, explicó François Grangier, piloto de aerolínea y experto del Tribunal de Casación francés, quien resaltó que el peligro es que estos restos proyectados dañen al avión.
Los aviones como el Boeing 777 están concebidos para volar con solo un motor mientras busca aterrizar. Un solo motor Pratt & Whitney PW4000-112 puede hacer volar un “triple siete” durante más de tres horas, afirmó el fabricante.
Este motor, cuyo diámetro es similar al del fuselaje de un Boeing 737, fue “muy innovador” a comienzos de la década de 1990 y “actualmente vive su edad adulta”, señala Grangier.
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El fabricante de aviones explicó que de los 1.656 avión Boeing 777 que están en operaciones, solamente 174 están equipados con motores Pratt & Whitney ya que en los otros los compradores optaron por motores General Electric o Rolls Royce.
Además, otros 128 aviones en servicio o guardados en hangares en todo el mundo equipados con el modelo de motor que registró fallas, pertenecientes a United Airlines, las japonesas JAL y ANA, o la surcoreana Asiana Airline, permanecen actualmente en tierra para pasar inspecciones.
“Cuando se hayan recuperado los restos y junto al avión, sabremos qué pasó y se verá si hay que revisar los protocolos de mantenimiento”, indicó el experto.
Precisamente, un percance similar sufrió en 2017 un Airbus A380 cuando perdió buena parte de uno de sus cuatro reactores sobre Groenlandia.
La Oficina de investigación y análisis francesa (BEA) encontró casi dos años después la pieza faltante enterrada en la nieve, determinando que el motor explotó por una microfisura provocada por la fatiga prematura de una aleación de titanio.
Esta falla en el motor se suma a una racha negra para Boeing que ha venido enfrentando duros golpes a su reputación por los reveses de su modelo 737 MAX, involucrado en dos accidentes en poco tiempo, con 346 personas muertas y la prohibición de volar durante casi dos años debido a problemas de software en los sistemas de vuelo automatizado.
Asimismo, también se han detectado defectos en el modelo 787 Dreamliner, para largos recorridos, por lo que en noviembre suspendió sus entregas.
Suspenden operación del Boeing 777
La compañía Boeing recomendó suspender las operaciones de todos sus aviones 777 con motores similares al implicado en un incidente en Colorado mientras se investigan las causas de las fallas del motor.
“Boeing está inspeccionando activamente el incidente relacionado con el vuelo 328 de United Airlines. Si bien la investigación de las autoridades está en curso, recomendamos suspender las operaciones de los 69 aviones 777 en servicio y de los 59 en almacenamiento con motores ‘Pratt & Whitney”, explicó la compañía.
Este pronunciamiento se conoce luego de que la Administración Federal de Aviación de EE.UU.(FAA) ordenara la suspensión de los vuelos con esta aeronave mientras se avanzan con las investigaciones y se realizan inspecciones adicionales en algunos aviones de pasajeros del modelo Boeing 777.
Asimismo, la aerolínea estadounidense United Airlines, víctima del incidente, las dos grandes compañías japonesas, ANA y JAL, y la surcoreana Asiana Airlines, ya habían anunciado la inmovilización de sus aviones de ese tipo.
En ese sentido, al menos 128 aviones equipados con un motor Pratt & Whitney están en tierra tras el incidente registrado el pasado fin de semana.
El experto de la consultora AIR, Michel Merluzeau, precisó que hay que determinar si se trata de un problema metalúrgico, de manutención, un defecto de fabricación o de tipo operacional, lo cual va a tomar un tiempo.
El ministro británico de Transportes, Grant Shapps, anunció este lunes una prohibición temporal de vuelo para esta serie en el espacio aéreo del Reino Unido.
Japan Airlines (JAL) y All Nippon Airways (ANA) anunciaron que dejaron en tierra, respectivamente, 13 y 19 aviones con motores PW4000, pero no anularon ningún vuelo porque sustituyeron esos aparatos por otros.
El Ministerio japonés de Transportes indicó que había ordenado inspecciones más estrictas después de que un avión JAL 777 que cubría la ruta de Tokio a Naha sufriera problemas con “un motor de la misma familia” en diciembre.
Por su parte, el Ministerio de Transporte de Corea del Sur informó que por el momento no tenía la intención de dejar aviones en tierra pero que monitorea la situación.
Pero Asiana Airlines, la segunda compañía más grande de Corea del Sur, ya tomó la decisión de no usar los siete Boeing 777 de los que dispone dentro de su flota.
En cuanto a Korean Air, la principal aerolínea del país, declaró que había dejado en tierra sus seis Boeing 777 equipados con motores PW4000 pero ahora espera instrucciones oficiales de los reguladores surcoreanos.
La pandemia de COVID-19 y sus desastrosas consecuencias en el transporte aéreo internacional han provocado la cancelación de pedidos de cientos de aviones tanto para Boeing como para su competidora europea Airbus.
El modelo Boeing 777, que está en servicio desde hace 25 años “tiene una reputación sólida”, pero este incidente nos recuerda que estas flotas están envejeciendo, indicó Merluzeau.