La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reveló que la pandemia del coronavirus podría dejar más de 45 millones de nuevos pobres en Latinoamérica debido al impacto económico y social que está dejando el COVID-19.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, aseguró que la pandemia del COVID-19 causará la mayor contracción económica en un siglo en la región; aumentando el desempleo, la pobreza extrema y la desigualdad.
“En un contexto en el que ya existen enormes desigualdades, niveles elevados de trabajo informal y servicios de salud fragmentados, las poblaciones y las personas más vulnerables son una vez más las más afectadas”, indicó Guterres.
De acuerdo con el informe de la ONU, la tasa de pobreza subirá un 7% en 2020 registrando un aumento de 45 millones de nuevos pobres en Latinoamérica; por lo que la cifra total de personas en la pobreza y extrema pobreza aumentará a 230 millones (37,2% de la población) en la región.
Este informe se conoce en momentos en que América Latina se ha convertido en uno de los focos mundiales de la pandemia al registrar más de tres millones de contagios y más de 140.000 muertos por el COVID-19.
La secretaria de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) Alicia Bárcena, también explicó que la economía de la región tendrá una contracción del 9.1 % siendo la mayor recesión registrada en un siglo.
“América Latina y el Caribe es una región que ya venía por siete años con un crecimiento muy bajo y con brechas estructurales de un modelo de desarrollo insostenible que se han exacerbado por una muy débil protección social, sistemas de salud fragmentados y profundas desigualdades. Entonces, la pandemia nos encuentra en un momento muy difícil”, manifestó Bárcena.
En ese sentido se cree que la pobreza extrema presentará un aumento del 4.5 % (28 millones de personas) y la cifra llegará a 96 millones de latinoamericanos que estarán en “riesgo de hambre”.
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Asimismo, los expertos pronostican que el desempleo aumentará un 13,5%, con lo cual la región pasaría a tener este año más de 44 millones de desempleados; con un aumento de 18 millones de personas más que en 2019.
Ante este escenario, el secretario de la ONU aseguró que estos niveles de desigualdad en la región son “insostenibles” y por eso se requiere reconstruir una economía más igualitaria que impulse el crecimiento y el bienestar de toda la población.
“Es necesario transformar el modelo de desarrollo de América Latina y el Caribe. Esto implica crear sistemas tributarios más justos, promover la creación de empleos decentes, fortalecer la sostenibilidad ambiental y reforzar los mecanismos de protección social”, explicó Guterres.
En ese sentido, la ONU reconoció que un rescate y ayuda internacional será fundamental para la región ya que la mayoría de países son de ingreso medio o bajo; ante el escenario de un aumento de los nuevos pobres en Latinoamérica.
“La respuesta multilateral internacional debería ampliarse a los países de ingreso medio, con financiamiento en condiciones favorables, extensiones en algunos casos, aplazamiento de pagos por servicio de la deuda, y desde luego ampliar la asignación de derechos especiales de giro”, destacó Bárcena.
Finalmente, la secretaria de la Cepal aseguró que los gobiernos de la región deben considerar otorgar un ingreso básico de emergencia de unos 140 dólares mensuales, por al menos seis meses; para mitigar el impacto de la pandemia en la economía y población en Latinoamérica.
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