¡Mujer, ten presente que la belleza no se mide en kilos sino en amor propio! Deja de torturarte con los estereotipos marcados por la sociedad, la perfección no existe y el grosor de tus caderas no determina el valor que tienes como persona.
No te destruyas diciéndote adjetivos que afecten tu autoestima, mírate en el espejo y aprende a quererte, ama tu cuerpo, tu esencia, la persona que eres hoy en día. Mírate con ojos de amor, acepta que tienes virtudes y defectos pero estando segura de que puedes trabajar en las partes que menos te gustan de ti. Eres bella a tu manera.
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¿Por qué todas tenemos que ser iguales?, ¿quién dijo que la belleza se define por la delgadez de un cuerpo?, ¿está mal no encajar en los patrones sociales?, ¿por qué no puedes aceptarte con tus kilos de más?… Son muchas las preguntas pero el detalle está en la respuesta que le asignes a cada interrogante.
La belleza está en los ojos de quien la mire, esto quiere decir que es subjetiva. Nadie tiene un medidor capaz de definir quién es más bello que otro, además… ¿cuando hablamos de belleza nos referimos a los kilos que tenga una persona o a la esencia de su alma?
Puede que te parezca un tema profundo, pero realmente no lo es. La respuesta es que eres bella a tu manera, con tu cuerpo, con tus curvas, con tus kilos de más o con los que te hacen falta. El trabajo duro está en cambiar la mentalidad de muchas personas y hacerlas ver más allá de la superficialidad.
¿Por qué no te amas como eres?
Muchas mujeres viven siguiendo modas y patrones pero se olvidan de cultivar su esencia. Dejan de lado alimentar su personalidad y deciden irse detrás de un “estándar social” que las margina a lucir de una forma determinada.
¡No, no y no! Basta de pensar que eres menos por tu peso. Mujer, la belleza no se mide en kilos sino en amor propio. Eres bella tal y como eres, si no lo consideras así entonces trabaja hasta verte y ser la persona que deseas apreciar en ti, solo asegúrate de hacerlo cuando tu esencia te pida a gritos encontrarte con una parte de ti que aún te falta, no cuando un grupo de personas te hagan pensar que para alcanzar la belleza tienes que ser talla cero o no tener ni un kilo de más.
Eres una mujer valiosa, fuerte, incansable, dedicada y poderosa. No permitas que otros tomen el control de tu vida, el poder de tomar decisiones está en tus manos y depende de ti escuchar a los demás o seguir a tu corazón y ser feliz con la mujer que eres, la que está frente al espejo.
Amor propio: el sentimiento que dura para toda la vida
Recuerda siempre que el amor propio existe en múltiples formas y colores, no se mide por el número de una etiqueta de ropa. Siéntete orgullosa de tu cuerpo, abraza tus curvas, acepta tus estrías y celulitis con dignidad. Tus cualidades y características te hacen única e irrepetible.
No permitas que esos ataques de inseguridad dañen tu esencia, deja esa negatividad en las personas que lo amanan al mundo, deja que sean ellos los que no se encuentren porque aún no han podido amarse como son. La mayoría que comparte ese pensamiento solo busca encajar en un patrón de perfección que los lleva a la infelicidad. Detén las malas energías y saca de tu vida a esas personas que solo desean para los demás la desgracia de vida que tienen.
Cada quien lucha en sus propias batallas, ¿acaso no es suficiente con las tuyas? No le sumes cargas que no te pertenecen. Ámate y brilla con la luz que llevas por dentro, no le tengas miedo a mostrarte como eres y si viene alguien a criticarte está bien, esos comentarios te harán más fuerte, pero en el fondo sabes que tú no estás mal, son ellos los que no se respetan, son ellos los que desconocen su valor.
¡Eres bella a tu manera! Así con curvas o muy delgada, sexy, tímida, alocada, reservada, callada, habladora, con maquillaje o cara lavada, arreglada o al despertar, con estrías, celulitis, cejas pobladas, rollitos, cachetes… No eres bella por cumplir con unas características establecidas, lo eres porque no dejas que nadie apague tu brillo.
Tus cualidades y características te hacen única e irrepetible.