Mauricia Ibáñez solo puede ver a sus hijos una hora a la semana. La Junta de Castilla y León y la Audiencia Provincial de Burgos la declararon incapacitada para ejercer como madre de sus mellizos, a quienes tuvo por vía de un tratamiento de fertilidad cuando tenía 64 años. Actualmente tiene 69.
De acuerdo a Antena3, los servicios sociales españoles le quitaron a sus hijos y los pusieron en una casa de preacogida “por estar en peligro de riesgo y desamparo”.
Los mellizos nacieron en 2017 tras un proceso de reproducción asistida, y a los 12 días los servicios sociales los separaron de su madre, relata un medio local, que informa que Mauricia también perdió la custodia de su hija mayor, de 8 años, que ahora reside en Canadá con un familiar, y con quien ella puede hablar por teléfono una vez al mes.
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De acuerdo a los reportes de servicios sociales, la custodia fue retirada por negligencia en la vestimenta y en la higiene de los niños, acusaciones que ella niega. Además, dos de los profesionales a cargo del caso señalaron que “Mauricia tiende a la suspicacia y le produce aislamiento social”.
El aislamiento social detectado se debe a que Mauricia tiene pocas relaciones familiares, y a juicio de las autoridades es necesaria una red de apoyo para cuidar de los niños.
Mauricia Ibáñez continuará peleando la custodia
Se hizo un acompañamiento para verificar que la madre que tuvo sus hijos a los 64 años pudiera contar con los medios para cuidarlos apropiadamente, pero hace dos días, el tribunal a cargo del caso falló que no había cumplido con los requerimientos. Ella ha manifestado el temor de que la pérdida de la custodia de sus niños sea definitiva, pues ese es el paso previo a la adopción.
“La Justicia ha dado la razón al trabajo de los técnicos y profesionales y no le quepa duda de que la preocupación de las personas que trabajan en los servicios sociales siempre son los menores. Ellos no pueden hablar, no pueden transmitir lo que sienten y es nuestra obligación ocuparnos de ellos y protegerlos. Son los más vulnerables y en este caso nos alegramos de que la Justicia ratifique las actuaciones que se estaban realizando”, dijo una vocera gubernamental sobre el caso.
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Mauricia Ibáñez, que afirmó que apelará esta última decisión, lleva ocho demandas desestimadas en cuatro años para intentar tener a sus hijos de regreso. En sus últimas declaraciones, asegura que llevará su caso hasta el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, de ser necesario.
El caso ha generado un intenso debate en España sobre la capacidad de esta mujer de cuidar de los niños, de su decisión de tener hijos a los 64 años y si es realmente justo que le haya sido negada la posibilidad de estar con ellos y mantener su custodia.
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