Son muchas las figuras femeninas que pasan por la vida de los seres humanos, mamá, hermanas, tías y claro las abuelas; estas últimas son verdaderamente especiales, ya que cuando una abuela ve por primera vez a su nieto es como si una nueva persona floreciera en ella, intensificando las emociones a niveles inimaginables. Por eso hoy hablaremos de cómo influye la crianza de las abuelas, tanto en los nietos como en ellas mismas.
Existe un proverbio chino que dice “El amor más perfecto, a veces, no llega hasta el primer nieto” y no es para menos; las abuelas se convierten en unas verdaderas súper mujeres y aunque la clásica imagen de la abuela ha cambiado (no se trata solo de mujeres que cuidan a sus nietos mientras hacen galletas), ellas siempre tendrán un lugar importante en la vida de los pequeños.
La crianza de las abuelas es tan importante como los padres
De acuerdo a un artículo publicado por el Psychology Today, titulado ‘Aprendiendo a ser abuela’, “un número creciente de abuelas se están convirtiendo en las cuidadoras de sus nietos”. Pero, Si por alguna razón las abuelas son las encargadas de criar a los niños, ellas no necesitan sobrecargarse de las labores que en realidad son responsabilidades de los padres, explica ABC del bebé.
Aunque cuidar a los nietos resulta bastante ventajoso, ya que se trata de una persona de confianza para los padres. Las abuelas deben entender que existen límites impuestos por los progenitores y no deben pasarlos. “por la experiencia y la autoridad se sienten con la potestad de participar en la crianza de los nietos”, explica el psiquiatra Christian Muñoz Farías.
Por eso se aconseja que se hablen con la abuela del pequeño, sobre los límites que ella tiene en la crianza, pero sin perder la diplomacia en cada una de las partes. De esta manera se le puede pedir acogerse a las normas establecidas por la pareja para la crianza de los niños. Así mismo se recomienda que siempre sea el propio hijo quien lo hable y no la nuera o yerno.
Te recomendamos: El comportamiento y las emociones de los niños se ven afectadas por las peleas de los padres
El primer nieto cambia la vida
Es común que al llegar el primer nieto algunas mujeres sientan que han entrado a la ancianidad, pero esto no es así. Tener ese primer contacto con una criatura frágil y diminuta, solo puede otorgarle plenitud, no solo crió a sus propios hijos, también logró estar para su decendencia.
Las abuelas deben estar consciente que su papel en la crianza no es educar por completo a sus nietos, ellas aprenderán a delimitar el espacio y la responsabilidad de los padres. En estos tiempos las abuelas solo buscan ser apoyo emocional, guía y facilitadora en la vida de este nuevo ser.
Recordemos que las abuelas de hoy tienen una vida más activa, muchas incluso trabajan, además de asumir otros roles en su vida como parejas, madres, amigas, etc. Otro punto importante es que cuando una mujer llega a esta etapa, la relación madre e hija mejora; ya que suelen asumir un papel de amiga pero también de mentora, lo que resulta beneficioso para todos.
Es necesario no sobrecargar a las abuelas
Es importante recordar a los padres, que a pesar de lo fundamental que es la ayuda de las abuelas en la crianza; no son ellas quienes deben tomar las grandes decisiones, ni encargarse de cada aspecto de la crianza que solo es responsabilidad de los progenitores.
Aunque en la mayoría de los casos, las abuelas crían a sus nietos con la mayor de las ganas, también es normal que comiencen a aparecer ciertas manifestaciones físicas y emocionales que reflejen el cansancio propio de la edad. Muchas veces ellas incluso pueden negarlo, ya que quieren participar activamente en la vida de los nietos. Por eso es importante que los padres no las sobrecarguen de responsabilidades.
Cabe destacar que las abuelas cumplen un papel tan importante en la crianza de sus nietos; que incluso muchas veces hasta actúan como apoyo económico y emocional; por lo que es necesario reconocer sus esfuerzos, y ser más sensibles con las generaciones mayores e inculcarles el valor del respeto a los más pequeños.
Las abuelas solo buscan ganarse el amor de sus nietos y compartir el máximo de tiempo con ellos; para lograrlo se albergaran de ternura, compresión y cariño. Ayudando además a desarrollar el carácter y la independencia que necesita cualquier niño, sin perder esa complicidad tan mágica que caracteriza la crianza de las abuelas.
Lee también: Gracias, a las mamás que tuvieron la valentía de quedarse cuando papá se marchó