El amor de madres es un sentimiento que difícilmente puede compararse con algún otro. De acuerdo al Centro Psicoanalítico de Madrid, “el bebé humano, nace en un estado de absoluto desvalimiento y dependencia, un estado de vulnerabilidad que se ve compensado por una relación intensa con la persona que lo cuida, en nuestra cultura y por lo general, es la madre”.
Los vínculos se van reforzando a través de los años y la relación que existe entre madre e hijo. “Esta relación puede fortalecerse a través de numerosas conductas como el juego compartido, la gestión de los conflictos en un clima de comunicación sereno y dialogante; la existencia de un sistema de normas flexibles y firmes, que ayuden a encuadrar al niño en su posición en la familia y en el mundo”, explica Lucía Dueñas, psicóloga general sanitaria y terapeuta del Centro TAP Psicología y Psiquiatría, en Madrid, España, para Cuídate Plus.
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El amor de madre rompe las distancias
Cuando nos convertimos en adultos y empieza nuestra propia vida lejos de mamá, comenzamos a extrañar esos momentos, olores, sabores y sobre todo, su compañía. Pero gracias a la tecnología, para continuar sintiendo ese amor de madre incluso en la distancia, todo lo que tendríamos que hacer es llamarla por teléfono.
De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Chicago, Estados Unidos, escuchar telefónicamente la voz de mamá, está vinculado a la misma sensación que causa un abrazo. Para comprobar esta hipótesis, los investigadores seleccionaron una muestra de niñas entre los 7 y 12 años.
Durante la investigación, el primer grupo recibió la llamada de su madre; mientras que el segundo recibió un abrazo de su madre. Además el tercer grupo vio una película considerada “emocionalmente estable”; este último no tuvo ningún tipo de contacto con la madre.
Finalmente los resultados encontraron que el primer y segundo grupo tuvieron un incremento en los niveles de oxitocina, mejor conocida como “la hormona de la felicidad”; generando sensación de bienestar y alivio. Mientras que el tercer grupo no presentó ningún incremento de esta sustancia.
Según los especialistas, los resultados de los dos primeros grupos evidenciaron un aumento idéntico en el nivel de oxitocina, lo que se considera como una especie de “sedante natural” que se asocia a la empatía y es capaz de aliviar los efectos de la hormona del estrés o cortisol, beneficios que se ven incrementados por el amor de una madre.
Otras investigaciones
Los efectos de la voz materna fueron objeto de otras investigaciones publicadas en la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia; la cual determinó que el recién nacido tiene una especial preferencia por la voz materna, generando un vínculo importante desde muy pequeños.
El psicólogo Aj DeCasper, uno de los autores del estudio, reveló que incluso la voz de una madre es mejor como alerta (en un caso de peligro), que una alarma bastante ruidosa. Entonces ya lo sabes: el amor de madre es un vínculo especial que nos beneficia sin importar los años que pasen, mientras sigamos en contacto con ellas.
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