Calles desoladas y tres capas de protección para salir a mercar. Así se vive en Wuhan tras el brote de coronavirus.
Hazzan Z es una de las 11 millones de personas que permanecen encerradas en sus casas para evitar contagios. Solo pueden salir a comprar víveres en las pocas tiendas que encuentren abiertas.
Para evitar el desabastecimiento, toneladas de alimentos entran en camiones regularmente, muchos de estos manejados por conductores voluntarios.
Cada persona está forzada a reportar y tomar su temperatura al menos una vez al día y cuando ingresan a supermercados o lugares públicos, deben ser registrados con termómetros para revisar si su temperatura está normal y permitir el acceso.
En este video Hazzan Z, registra mediante su canal de YouTube cómo están viviendo realmente las millones de personas atrapadas en la ciudad epicentro del coronavirus en China.