La autoridad de transportes de Londres no renovará la licencia de Uber para operar en la capital británica, según anunció el lunes, en un gran revés para la firma de transportes solicitados por app.
Uber prometió apelar la decisión y tenía 21 días para hacerlo. La compañía podía seguir operando durante el proceso de apelación.
Al anunciar su decisión, Transport for London citó “varias infracciones que pusieron en peligro a los pasajeros y su seguridad”. La licencia expiraba el lunes a medianoche.
El organismo señaló que si bien la compañía había corregido algunos problemas, no tenía “suficiente confianza en que no se reproducirán problemas similares en el futuro”.
Por lo tanto, la agencia declaró a Uber “no apta en este momento”.
Uber afirmó en un comunicado que la decisión de no renovar su licencia en Londres era “extraordinaria y errónea”.
“En los últimos dos años hemos cambiado de forma fundamental nuestro negocio y estamos marcando el estándar de seguridad”, señaló la compañía, señalando que Transport for London les había considerado aptos dos meses antes.
La agencia reguladora había ido estrechando la vigilancia sobre Uber. En septiembre renovó su licencia por apenas dos meses e impuso condiciones más estrictas, debido a preocupaciones por sus estrategias corporativas agresivas y la seguridad de los pasajeros.
Uno de los motivos claves para la retirada de licencia, señaló el organismo, fue un cambio en los sistemas de Uber que permitía a conductores no autorizados subir sus fotos a perfiles de otros conductores.
Esto les permitía recoger a pasajeros como si fueran el conductor seleccionado en al menos 14.000 viajes, de modo que todos esos trayectos se hicieron sin seguro, indicó Transport for London.
Además, algunos pasajeros viajaron con conductores sin licencia, incluido uno al que la agencia le había retirado el permiso.
América Digital/AP