Sebastiana Barraez revela nombres de los responsables de tortura en el Dgcim

En una entrevista con el periodista César Miguel Rondón, la experta en asuntos de militares y de seguridad, Sebastiana Barraez, develó que dentro de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim) resaltan al menos tres nombres como responsables de la tortura de los detenidos en la sede de este organismo.

Barraez asevera que la figura más relevante en el esquema de torturas del Dgcim es Alexander Gramcko Arteaga, responsable de la ejecución de Óscar Pérez, inspector desertor del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de Venezuela (Cicpc).

También mencionó a “un oficial de apellido Blanco” y al Coronel Hannover Esteban Guerrero como pieza “fundamental y clave”, ya que, ocupa el cargo de director de investigaciones del Dgcim.

“Allí hay unos funcionarios de la Guardia Nacional y del Ejército que están fundamentalmente a órdenes de un oficial de apellido Blanco”.

No obstante, insistió en que la figura de Gramcko Arteaga es la más importante, a pesar que no tiene el rango más alto dentro de la institución.

“El subdirector de la Dirección General de Contrainteligencia Militar es el general Blanco; y Gramcko Arteaga está por encima de este general en lo que atenciones y a poder se refiere en la Dgcim”.

Esta información fue proporcionada por la periodista en el programa En Conexión, después de decir que los dos jóvenes que fueron sentenciados por el asesinato del Capitán de Corbeta Rafael Acosta Arévalo son inocentes “porque quienes torturan no son este tipo de oficiales, de este rango”.

El régimen venezolano confirmó el sábado 29 de junio el asesinato de Acosta Arévalo, quien se encontraba bajo custodia de los funcionarios de la Dgcim y que fue señalado por participar supuestamente en una conspiración para derrocar al mandatario Nicolás Maduro.

Dos militares de la Guardia Nacional fueron detenidos por su presunta responsabilidad en esa muerte que ocurrió como consencuencia de una tortura. Para el lunes 8 de julio, el Estado aún no ha entregado el cuerpo a los familiares.

Por su parte, el martes 2 de julio, se filtró un fragmento de la autopsia que se le practicó al cadáver del capitán de corbeta en el que se determinó como causa de muerte “edema cerebral severo debido a insuficiencia respiratoria aguda, debido a rabdomiólisis por politraumatismo generalizado”.

Asimismo, Barraez puntualizó que el caso de Acosta Arévalo “ha subido el miedo dentro de la institución Armada porque ya hay una certeza que cualquiera que asuma una posición contraria al gobierno está sentencionado a no solamente ser torturado, sino a ser asesinado”.

Sin embargo, la periodista sostiene que “ese sentimiento de miedo no está por encima del sentimiento de indignación”. 

“Hay como un gran luto dentro de la institución armada porque a pesar de que el Capitán de Corbeta estaba retirado, su muerte pues causa impacto porque hasta el momento los militares no habían asumido -a pesar de la gran cantidad de denuncias por torturas- que a un oficial se le pudiese torturar”.