La Organización de Estados Americanos- OEA- convirtió en oficina permanente su grupo de trabajo para los migrantes y refugiados venezolanos, ante la magnitud de una diáspora que ya ha llevado a más de cuatro millones de personas a dejar el país suramericano.
David Smolansky, comisionado del jefe del Parlamento, reconocido por más de 50 países como preisdente encargado, Juan Guaidó, en la OEA explicó que la decisión se tomó “ante un flujo migratorio sin precedentes que altera las capacidades de los países receptores”.
El secretario general del organismo, Luis Almagro, creó en 2018 el referido grupo de trabajo con el doble objetivo de elaborar un informe sobre la migración de venezolanos y captar fondos para hacer frente al problema.
*Lea también: Venezuela será el primer país latinoamericano investigado por DDHH
Smolansky también insistió en la necesidad de crear una “Tarjeta de Identidad Regional” en Latinoamérica con el fin de regularizar la situación de dos millones de venezolanos que, calcula, están sin documentación.
“Los venezolanos huyen de un conflicto que viola los derechos humanos, promueve la violencia generalizada y altera el orden público”, subrayó Smolansky, en rueda de prensa desde Nueva York con motivo de la Asamblea General de la ONU.
Una comisión venezolana pidió la cooperación del Reino de los Países Bajos para iniciar un proceso de registro de 40 mil refugiados venezolanos que se encuentran en las islas de Aruba y Curaçao.