Este fin de semana, la administración de Nicolás Maduro y la coalición que acompaña al jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, quien se juramentó como presidente interino el pasado 23 de enero, enviaron delegaciones a Oslo, capital de Noruega, para emprender una negociación sobre una posible salida a la crisis que vive Venezuela actualmente.
A pesar de la poca precisión que ha circulado en las informaciones referentes al encuentro, ninguno de los dos bandos políticos negaron dichos los acercamientos. Por un lado, Maduro asegura que el objetivo de las conversaciones es buscar “la paz y el diálogo por nuestro país”, mientras que Guaidó sostiene el argumento de que la reunión se está dando por la invitación que recibieron de Noruega para mediar en el conflicto.
“Es una invitación a una mediación de Noruega, es decir, no es negociación, no es diálogo, no utilicemos (…) la narrativa del régimen. Es una iniciativa más de las que estamos llevando, que sencillamente, si tenemos cese de usurpación (de Maduro), gobierno de transición y elecciones libres, habrá funcionado”, explicó Juan Guaidó.
No obstante, Noruega forma parte de los países que aún no ha reconocido a Guaidó como presidente interino. Hasta ahora, al menos 55 países consideran al parlamentario como el encargado del Ejecutivo bajo fundamentos constitucionales.
Sin embargo, el país nórdico ejerció como facilitador en reiterados procesos de diálogo como el que llevó a la firma de los acuerdos de Oslo entre israelíes y palestinos o las conversaciones entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC, en donde fue uno de los garantes de estos encuentros junto a Venezuela, Cuba y Chile.
La intervención de Noruega en el proceso de paz de Colombia genera desconfianza en la oposición venezolana, por considerarse que a raíz del mismo se pueden haber generado relaciones afables entre régimen de Maduro y el Gobierno de Oslo, lo cual perjudicaría a la delegación de Guaidó.
La primera información oficial sobre este encuentro se realizó este fin de semana por parte del Ministerio de Exteriores noruego, que emitió un comunicado en el que reiteró su compromiso para buscar “una solución acordada” entre las dos partes tras una ronda de conversaciones preliminares.
La delegación del chavismo, está presidida por el vicepresidente sectorial de Maduro, Jorge Rodríguez, junto al gobernador del estado Miranda (norte), Héctor Rodríguez, y el canciller del régimen, Jorge Arreaza.
Mientras que por el lado de Guaidó, se presentará el segundo vicepresidente del Parlamento venezolano, Stalin González; el exalcalde del municipio caraqueño de Baruta, Gerardo Blyde, y el exministro de Transporte y Comunicaciones, Fernando Martínez Mottola, bajo la asesoría del exrector del Consejo Nacional Electoral (CNE), Vicente Díaz.
¿Y si no funciona la negociación?
Usuarios de las redes sociales han manifestado su temor sobre el posible fracaso que podría darse a raíz de este encuentro, al resaltar que se han realizado al menos tres reuniones similares que no han surtido efecto. Por el contrario, exponen que los diálogos han dado “oxígeno” a la administración de Maduro.
escasez de comida y medicinas, falta de luz, falta de agua, falta de internet, no hay gasolina, diálogo en Noruega, no hay efectivo, las bombonas de gas no se consiguen
yo intentando ignorar todo:
— Jon Marín Emerson (@nosabesnadajon) 27 de mayo de 2019
Acuerdo en Noruega, entre el chavismo y representantes de Guaidó, es sobre cambiar rectores del CNE.
Maduro quedaría en el poder hasta realizar elecciones, pudiendo ser candidato o postulando a otro del chavismo.
✅BOICOTEAREMOS CUALQUIER INTENTO DE PACTO ELECTORAL CON EL PSUV.
— Eduardo Bittar (@EDUARDO_BITTAR) 27 de mayo de 2019
#zoomvenezuela NORUEGA NO ES NI IMPARCIAL NI IDÓNEO, por varias razones geopolíticas. 1. No han reconocido a Guaido 2. Apuestan al fracaso de EE.UU. 3. Son artífices del pacto de impunidad de las FARC
— Pedro Luis Pedrosa Rodriguez (@soypedropedrosa) 27 de mayo de 2019
Son inaceptables las mentiras, lo de Noruega, los bluffs sobre el quiebre y la campaña que están montando, para nuevamente chantajear al país con unas “elecciones”, que siempre han sido un negocio lucrativo para sus involucrados, mientras el país se desvanece. Eso es inaceptable. https://t.co/ksAK1CPCwO
— Juan C. Sosa Azpúrua (@jcsosazpurua) 26 de mayo de 2019
Por su parte, el politólogo venezolano Oswaldo Ramírez, realizó una comparación el 26 de mayo en un evento que pretendía analizar la serie Juego de Tronos, llamada “Catedra del Pop”, entre el final del programa televisivo y la negociación que se pretende realizar en Oslo.
A su juicio “negociar no es malo, siempre negociar va a ser bueno”, aunque resaltó de forma implícita que “hay que ser muy ingenuo para pensar que tu adversario no va a tratar de hacerte trampa como lo hizo en el 2002, 2014, 2017, pero también hay que ser muy ingenuo en no pensar que al final se van a tener que sentar a negociar para poder resolver los asuntos públicos de Westeros (mundo fantástico en el que se desarrolla Juego de Tronos)”.
Entretanto, Guaidó expresó en Lara (centro occidente) sobre el posible escenario del fracaso de estas conversaciones, que de no funcionar este contacto, la oposición seguirá apuntando a los demás mecanismos planteados para solucionar la crisis, como la cooperación internacional, el Grupo Internacional de Contacto y las protestas.
“Si hay dudas aún en algún país de la comunidad internacional del cual requerimos respaldo para avanzar en lo que sea necesario, bueno, que vea claramente que hemos puesto todo de nuestra parte para lograr una transición ordenada, pacífica, de cara al cese de la usurpación y por supuesto a que haya elecciones libres”, apuntó.