La tercera ronda de negociaciones entre representantes de Nicolás Maduro y Juan Guaidó, que debía iniciar la primera semana de julio, no ocurrirá. La muerte del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo, entre denuncias de tortura e inconsistencias de los voceros oficiales, es la causa de la suspensión del encuentro.
En los días posteriores a la visita de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, la posición entre las partes se había acercado -el propio Guaidó había declarado que sus representantes no regresarían a la mesa de negociaciones- con la liberación de 59 ciudadanos colombianos detenidos desde el año 2016 en Caracas, las denuncias alrededor de la muerte de Arévalo Acosta negaron la posibilidad de materializar el encuentro.
“Es imposible”, dijo una fuente cercana a la representación de Juan Guaidó a América Digital cuando fue consultada sobre la factibilidad del encuentro luego de que el militar, arrestado el pasado 21 de junio y quien fuese acusado por Jorge Rodríguez el 26 del mismo mes de participar en una intentona golpista contra Nicolás Maduro, falleciera el sábado 29 de junio, al tiempo que su abogado y su esposa denunciaban que había sido torturado mientras se encontraba en custodia de funcionarios de seguridad del régimen de Nicolás Maduro.
Las negociaciones entre las partes debían iniciar entre martes y miércoles, inicialmente en Barbados, aunque para el momento de la suspensión aún se barajaba la posibilidad de que Noruega -país sede de las dos primeras rondas de diálogo- acogiera también el encuentro.