La intervención en Venezuela no ocurrirá “porque no les interesa”

El embajador, profesor de Derecho Internacional y el director del portal Analítica, Emilio Figueredo, considera positivo que se pueda poner en vigencia nuevamente el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) luego de que la Asamblea Nacional insistiera en la reincorporación de Venezuela a ese acuerdo, aunque advirtió que no se debería dar tanta importancia a ese mecanismo.

Figueredo, en entrevista con César Miguel Rondón en el programa En Conexión el 8 de julio, recordó que el TIAR podría proteger a un país en caso de una eventual intervención militar o invasión a un país de América, por ende, las acciones que adelanta el Parlamento si se comprueba que hay una acción de este tipo en Venezuela, pudiera llevar a una posible invocación del tratado.

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Aunque aclaró que los principales actores que están suscritos en el TIAR son parte del denominado Grupo de Lima, coalición de naciones que se ha mostrado en contra de una acción militar para darle solución a la crisis venezolana.

Indicó que la intervención militar no ocurrirá “porque no le interesa a nadie y hay un rechazo a esa fórmula”.

Además, dijo que aunque existan mecanismos no hay una opción única que dé con el desenlace de la situación en el país, por lo que dijo que ese es el error en el que incurren los detractores de la búsqueda de estas herramientas porque “lo que no existe es la solución mágica”, sino una mezcla de factores.

Mencionó que ahora es la comunidad internacional que, con el tema Venezuela, negocian entre sí la forma en la que se solucionará el conflicto que hay en la nación sudamericana y es por esa razón que las conversaciones en Oslo no son una negociación entre el Ejecutivo de Nicolás Maduro y la oposición, “sino que simplemente es una mediación hecha por Noruega para encontrar salida a la crisis en función de la comunidad internacional”.

Señaló que la óptica de los demás países, “independiente de cómo nos duela”, es vista desde el punto de vista de cómo puede afectar el hemisferio el problema venezolano o si se extiende más allá y abarca a todo el planeta.

Considera que en Barbados, lugar en donde se llevará a cabo la reunión, se hablará sobre si Maduro estará o no en el poder con la convocatoria a elecciones libres, al tiempo que explicó que los eventuales comicios no tendrían como candidato al actual mandatario.

Por eso, subrayó que “el cese de la usurpación no es negociable”.

Dijo que las negociaciones tienen dos fases, una que son las posiciones y la otra, los intereses. En el caso de la posición, sin aquellas que son de principios “y las más difíciles de resolver” y luego los intereses, que son la base en la que se negocia.

Recalcó que hay varios países y organismos multilaterales que celebran las reuniones que se llevan a cabo en Barbados a instancias de Noruega, por lo que subrayó que “lo que se hace no es negociación entre Gobierno y oposición, sino se busca una solución a la crisis o una imposición por parte de la comunidad internacional que no quiere que esto se prolongue más porque es un factor de desestabilización regional”.

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Además, agregó que tras alcanzar una salida, Venezuela necesitará múltiples ayudas en materia económica por parte de la comunidad internacional como refinanciamiento de deudas y préstamos de varios organismos como el Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

De igual forma, alertó que la producción petrolera venezolana está por llegar a menos de 500.000 barriles de petróleo al día, lo que hace que sea insuficiente para cubrir la deuda que se tiene con países como Rusia y China, así como tampoco pueden enviar crudo a Cuba para evitar que caigan en apagón.

“Para llegar a los niveles de 1998 se necesita invertir 250 mil millones de dólares durante ocho años”.