En Francia crece la preocupación tras diez días de huelga de transporte que amenaza con generar problemas en el transporte de cara a las fiestas navideñas.
La ausencia de trenes y metros, más los aeropuertos colapsados es el dolor de cabeza tanto de los ciudadanos como del gobierno, que quiere reunirse con los sindicatos para hablar sobre la reforma del sistema de pensiones.
Este sábado 30 % de los trenes de alta velocidad y los regionales funcionaba en el país. En París había nueve líneas de metro cerradas, sobre un total de 16, y algo más de la mitad de los autobuses conseguían circular.
*Lea también: Una desafiante Corea del Norte realiza prueba “crucial” en base de satélites
Si el movimiento continúa podría poner en peligro las vacaciones de decenas de miles de personas, ya que harán falta varios días para recuperar la normalidad en los transportes.
“La mitad de los viajeros” tendrán trenes para las fiestas de fin de año, según la SNCF, la compañía nacional de trenes francesa, citada por el diario Le Parisien.
Los sindicatos rechazaron de plano esta semana la idea de una “tregua de Navidad”.
“Si el gobierno quiere que el conflicto termine antes de las fiestas, le queda una semana para tomar la buena decisión, optar por el sentido común y retirar su reforma de las pensiones“, dijo a la agencia AFP Laurent Brun, secretario general del sindicato CGT-Ferroviarios, el sindicato más importante de la SNCF.
El clima no ayuda a Francia
A la par, el temporal de fuerte viento dejó este sábado a unos 40.000 hogares se quedaron sin electricidad este sábado como consecuencia de los fuertes vientos que azotan el litoral atlántico.
Las autoridades precisaron que 20.000 hogares siguen sin luz en Nueva Aquitania, 7.500 en Occitania, 5.000 en Normandía, y los 7.500 restantes se repartían por todo el territorio.
Se han movilizado a 2.000 técnicos para restablecer la electricidad en los departamentos afectados, desplazados desde las regiones vecinas.
El servicio meteorológico de Francia mantiene para el fin de semana 14 departamentos en el suroeste, los Alpes y la isla mediterránea de Córcega, bajo vigilancia naranja principalmente por vientos fuertes e inundaciones.
El viernes, este temporal, con ráfagas de hasta 140 km/h, dejó a más de 220.000 hogares a oscuras en el suroeste y provocó un muerto, un desaparecido y cinco heridos.