Día Mundial de las Abejas: ¿por qué son indispensables para la humanidad?

El planeta conmemora el Día Mundial de las Abejas. Foto: Pixabay

El planeta conmemora el Día Mundial de las Abejas, unas de las especies más importantes del mundo por su papel en la biodiversidad y la alimentación de la humanidad.

Esta pequeña especie ha contribuido con su arduo trabajo a la alimentación de millones de personas, plantas y animales, garantizando que podamos sobrevivir en el planeta.

Aunque es pequeña en tamaño su papel es fundamental en los ecosistemas con su polinización, la cual nos permite producir los alimentos que consumismos a diario, contribuyendo así a la seguridad alimentaria y la nutrición del mundo.

La polinización es un intercambio de polen entre las flores y su principal objetivo es lograr la reproducción de cualquier tipo de semilla y de frutas, por lo que si no se cumple este proceso no tendríamos alimentos de la forma como los obtenemos en la actualidad.

El papel de la polinización también tiene un impacto positivo en el medio ambiente debido a que contribuye a mantener la biodiversidad y las dinámicas de los ecosistemas de las que depende la agricultura mundial.

Además, las abejas son famosas por su papel en el suministro de alimentos de alta calidad como miel, jalea real y polen) y otros productos como la cera, el propóleo y veneno.

Esta fecha fue establecida porque en este día nació Anton Janša, uno de los más grandes pioneros de la apicultura moderna y quien pertenecía a una familia de apicultores en Eslovenia; donde esta es una actividad agrícola de larga tradición.

La importancia

La ONU ha destacado que cerca de las tres cuartas partes de las especies agrícolas del mundo dependen de las abejas para cumplir su proceso de desarrollo y producción de alimentos.

En los últimos años se han encendido las alertas; ya que se está presentando una considerable disminución de la población de abejas en el mundo.

Esta situación se está presentando debido a la utilización de pesticidas en la agricultura y la contaminación del aire; así como fenómenos meteorológicos extremos generados por el cambio climático.

“Las investigaciones preliminares muestran que los contaminantes del aire interactúan con las moléculas aromáticas liberadas por las plantas que las abejas necesitan para localizar los alimentos. Las señales mixtas interfieren con la capacidad de las abejas para alimentarse; haciéndolas más lentas y menos efectivas en la polinización”, reseña la ONU.

Este complejo escenario puede generar una crisis en la seguridad alimentaria del mundo. Los expertos han explicado que más del 75 % de los cultivos dependen de la polinización de las abejas.

Asimismo, estaríamos en riesgo ante un aumento de los brotes de plagas y enfermedades; las cuales provocarían graves problemas de salud para la población en el planeta.