En una entrevista otorgada a América Digital, el presidente del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, juramento como presidente interino de Venezuela el pasado 23 de enero, hizo referencia a la muerte de los infantes del Hospital J.M. De Los Rios que se encontraban esperando transplante de médula ósea, calificándolo de “una tragedia sin precedentes”.
“Por supuesto, que estamos desgarrados, literalmente de impotencia, de ganas de poder hacer más, de poder ayudar, de que ingrese la ayuda humanitaria, de que de una vez cese la usurpación”.
Asimismo, criticó a la administración de Nicolás Maduro por aseverar que los niños fallecieron por las sanciones que el Departamento de Estado de Estados Unidos impuso a la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) en pasado enero, ya que, este es el sexto año consecutivo que el Producto Interno Bruto (PIB) del país caribeño se contrae.
También resaltó que desde el año 2018 el régimen adeuda casi 10 millones de euros con la clínica con la que poseían el convenio para realizar los trasplantes de los niños. De hecho, el programa de tratamientos médicos con el gobierno de Italia se paralizó desde el año 2017.
El “descaro” de Arreaza
Jorge Arreaza, ministro de Relaciones Exteriores de Maduro, reclamó en su cuenta de Twitter que el “bloqueo criminal de EEUU impide transferir fondos a las instituciones italianas de salud con las que Pdvsa atendía estos casos urgentes”. Pero, ante esta denuncia, fueron descubiertas recientemente facturas en las que, antes de las sanciones, “pagaba” parte de la deuda. El Embajador de Venezuela ante Estados Unidos designado por Juan Guaidó, Carlos Vecchio, publicó las pruebas del tal afirmación en su cuenta en la misma red social.
1. @jaarreaza tu bajeza no tiene nombre en un tema tan delicado con muerte d niños. Eres manipulador. Las propias facturas q colocas claramente indican q son deudas d 2018 cuando no había sanciones sobre PDVSA. Muestra más bien q ustedes no pagaban a tiempo. Se roban los reales pic.twitter.com/c5y97xhHCl
— CARLOS VECCHIO (@carlosvecchio) May 27, 2019
En los documentos, se observa que Arreaza realizó estos pagos en 2018 y 2019, lo cual desmiente el impacto de las sanciones en la moratoria. Por su parte, el gobierno italiano no tiene información respecto a estas transacciones.
Washington reiteró que impuso las sanciones a la petrolera como medida de presión que buscaban bloquear el acceso de Maduro a los ingresos petroleros del país luego de que Guaido asumiera como presidente interino y fuese reconocido por más de 55 países. No obstante, Maduro ha burlado parte de las mismas mediante convenios con Rusia y China; también a principios de mayo aprobó 56 millones de euros para la compra de armamento y uniformes militares.
“Son tan descarados y tan cínicos que publicaron la orden de pago y tiene fecha posterior a las sanciones cuando ya sabían que esas cuentas no pueden ser utilizadas por ellos. Ah, pero si podían comprar armas, si podían comprar uniformes militares, ¿por qué no utilizaron la cuenta que si servía?”.
Millones en riesgo
Ante la crisis humanitaria, el también parlamentario dijo que han atendido a 100 mil personas a través de Rescate Venezuela, un organismo que lidera su partido, Voluntad Popular, para ayudar a las personas que se encuentran afectados por la crisis humanitaria que atraviesa Venezuela.
Agregó que con esto han tenido dos focos; en primer lugar atender a los más vulnerables de la emergencia humanitaria para visibilizarla y atenderla. El segundo es cambiar a través de una elección libre.
Sin embargo, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, reconoció que hay 7 millones de venezolanos que se encuentran en la actualidad bajo una emergencia humanitaria compleja, lo que representa el 25% de la población.
Guaidó resaltó que la cifra puede inferir que uno de cada cuatro venezolanos está en riesgo de muerte por lo que hizo una crítica constructiva a la ONU: “En un día no se produce que el 25% de la población está en emergencia. No pudieron esperar tanto tiempo para declararla, para reconocerla de esa manera”.
Estas circunstancias las atribuyó a la administración de Maduro, asegurando que “destruyeron el sistema de salud, se robaron el dinero del sistema de salud venezolano, no les importó la vida del venezolano”.
También expuso que el Estado venezolano adeuda 4 mil millones de dólares a las farmacéuticas, razón por la cual no hay medicamentos los medicamentos suficientes en el país para afrontar la crisis humanitaria.
“Tienen además deudas también, con muchos proveedores de alimentación, por eso tienen que comprarlos a través de terceros con sobreprecio hasta 700% como demostró México en la investigación, por ejemplo, del CLAP, del subsidio de alimentación. Entonces ya hoy nadie les cree.
No obstante, comentó que van a atender a los niños y padres que sufren estas circunstancias aunque no especificó las acciones que se tomarían al respecto.
El jefe del Parlamento resaltó que el ingreso de la ayuda humanitaria a través de la Cruz Roja Internacional fue una de las vías que encontraron para lograr el objetivo.
“Quisiéramos que fuera más eficiente, quisiéramos que fuera más rápido, quisiéramos que pudiéramos abarcar más gente”.
De igual forma, precisó que no va a ser suficiente la ayuda humanitaria que ingrese mediante la CRI mientras Maduro “siga secuestrando el poder”, porque no se reconoce plenamente toda la emergencia.
Sobre la ayuda humanitaria que ha ingresado al país, el ministro de Salud de Maduro, Carlos Alvarado, explicó este martes 28 de mayo en el programa “Al Aire” del canal Venezolana de Televisión (VTV), que ésta llegó al país con medicinas y que la distribución es realizada según la petición de los centros hospitalarios.
Son más de 269 toneladas de medicamentos y material quirúrgico, que ha llegado y que todo es distribuido inmediatamente sin quedarse en los almacenes. Aclaró que esta asistencia representa solo un 15% del inventario de medicinas del país y que el resto “lo compra” el gobierno de Maduro. La más reciente inversión, sería de USD $106 millones para adquirir medicinas desde China, que llegarán la semana que viene a Venezuela.