En la mañana de este jueves 30 de mayo, el Defensor del Pueblo en Venezuela, Alfredo Ruiz, declaró que la muerte de los infantes no se debe a causa de infecciones en el Hospital de Niños J.M. de los Ríos en Caracas. El pasado martes, padres y representantes del sector salud denunciaron que el piso 4 del centro hospitalario tenía rota la tubería de aguas servidas.
Ruiz aseguró que estos fallecimientos fueron causados por las enfermedades que presentaban los niños y no por un supuesto brote infeccioso del hospital, basándose en el dictamen de una junta médica. Explicó que estas afecciones “las traen de afuera” y que son por ellas mismas que los infantes padecen un final trágico.
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En la misma medida aclaró que la administración de Nicolás Maduro ha invertido en la salud pública y, que en este momento, el bloqueo por parte de Washington hacia Petróleos de Venezuela (PDVSA) está afectando al sector.
Situación bajo un informe
La diputada a la Asamblea Nacional de Venezuela por el estado Miranda, Manuela Bolívar, expuso este jueves, parte del informe sobre la situación del centro hospitalario por parte de la Comisión de Seguimiento Ayuda Humanitaria. En él se expresa una clara preocupación del estado en el que se encuentra la salud de los pacientes en dicho hospital.
Bolívar afirmó que, según sus investigaciones, desde el 2018 se canceló el programa de transplantes de médula ósea que tenía Venezuela con el Gobierno Italiano. Esta pausa ocurrió gracias a la deuda venezolana de más de 10 millones 746 mil euros, aseguró.
Dip. @manuelabolivar expone informe de la Comisión de Ayuda Humanitaria sobre la crisis del JM de los Ríos #NiUnNiñoMás https://t.co/1zLNcYn0ml
— Voluntad Popular (@VoluntadPopular) May 30, 2019
“Hay pacientes que hicieron la solicitud desde el 2016 que no llegaron a Italia”, expresó la diputada. Esto significa que ya el convenio venía presentando fallas claras, esclareció.
Asimismo, denuncia que no son las “sanciones” (de EEUU), las que afectaron al programa, sino que la administración de Nicolás Maduro ya tenía el problema desde hace tiempo.
En enero del presente año, el gobierno de Donald Trump sancionó a la empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA), en el congelaron las cuentas de dicha compañía y prohíbe la compra del crudo a otros países. Desde entonces, el país se ha visto afectado por el desabastecimiento de gasolina.