El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este domingo su renuncia al cargo, luego de haber anunciado en horas de la mañana que se repetirían las elecciones presidenciales tras recibir las sugerencias de la OEA de irregularidades en los comicios pasados.
En una rueda de prensa desde el departamento de Cochabamba, específicamente en Laucán, indicó que “después de escuchar” a los sectores del país de buscar la paz en Bolivia, deja su cargo. Otro de los motivos que señaló para tomar su decisión fue “para evitar que (Carlos) Mesa y (Luis Fernando) Camacho sigan persiguiendo a mis hermanos”.
Durante varios días, se registraron protestas continuas por parte de sectores adversos a Morales tras denunciar fraude electoral y este domingo, luego del informe por parte de la OEA, se evidenciaron quema de casas y golpearon a familiares de los personeros del Ejecutivo.
“Estoy renunciando para que nuestros hermanos y hermanas, dirigentes y autoridades del Movimiento al Socialismo no sean hostigados, ni perseguidos. Lamento mucho este golpe cívico y algún sector de la policía para atentar contra la democracia, con violencia y amedrentamiento”.
Morales señaló que “la lucha no termina” porque continuarán luchando “por la igualdad y la paz” y denunció que su salida del poder se debe a la acción de “grupos oligárquicos que conspiran contra la democracia”.
Por su parte, el vicepresidente Álvaro García Linera anunció también su renuncia a ese cargo y el de presidente de la Asamblea Legislativa Plurinacional. “Estaré siempre a su lado, acompañándolo en las buenas y en las malas”.
Señaló que buscarán restablecer el orden constitucional pero no a base de “sangre y fuego”, como los grupos que “provocaron muerte y violencia”.