Estados Unidos puso en marcha este miércoles en Davos (Suiza) una nueva ofensiva comercial contra Europa, con amenazas de imponer aranceles a los vehículos si los europeos no abandonan sus proyectos de impuestos digitales o no firman un acuerdo comercial con Washington.
Tras una primera jornada, el martes, dominada por la cuestión del clima, el presidente Estados Unidos, Donald Trump impuso en el Foro Económico, la reunión anual de la élite política y económica mundial, uno de sus temas predilectos: el equilibro en las relaciones comerciales del país con el resto del mundo.
“Es muy muy duro tratar con Europa. Aprovechan las ventajas de nuestro país desde hace años (…) Si no logramos algo [en las negociaciones comerciales] tomaré medidas, serán impuestos muy elevados a sus automóviles y otros productos” importados, indicó Trump en una entrevista a la cadena CNBC.
El presidente estadounidense, que el martes se reunió con la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen en Davos para empezar a negociar un “acuerdo comercial bilateral”, cree que será “muy fácil”.
“Si no podemos hacer un acuerdo comercial [con la UE] tenemos que imponer una tasa del 25 % sobre sus coches”, afirmó en otra entrevista con la cadena Fox News.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin también habló de la cuestión del comercio con Europa: “Si quieren imponer arbitrariamente tasas sobre nuestras empresas digitales entonces estudiaremos imponer tasas arbitrarias a los fabricantes de automóviles”.
Las amenazas llegan una semana después de que China y Estados Unidos firmaran un acuerdo preliminar que pone fin a dos años de guerra comercial entre las dos potencias económicas.
“Quería esperar terminar con China. No quería ocuparme de China y Europa al mismo tiempo. Ahora lo de China está hecho”, resaltó Trump a CNBC.
Una de las principales causas de tensión entre Estados Unidos y Europa es la tasa que impone Francia a las actividades del sector digital, un impuesto muy criticado por Washington que amenaza con imponer el equivalente de 2.400 millones de dólares de productos franceses.
Otros países de la UE ya están aplicando una tasa similar, como Austria e Italia, y otros, como Reino Unido o España podrían hacerlo en breve.
“No renunciamos proponer la creación de ese impuesto digital”, pero privilegiamos soluciones “en el ámbito internacional” explicó Nadia Calviño, la vicepresidenta español de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Por su parte el ministro británico de Finanzas, Sajid Javid, aseguró que Londres pondría en marcha “en abril” su propia tasa digital, considerada como “una sobretasa temporal que caerá cuando haya una solución internacional”.
El ministro francés de Finanzas y de Economía, Bruno Le Maire, dijo por su parte que “pase lo que pase las empresas digitales pagarán una tasa en 2020 en Francia”.
“O tenemos una solución internacional (…) y en este caso (…) la tasa internacional sustituirá la tasa nacional (…) o bien no hay acuerdo, y en ese caso se aplicará la tasa nacional”, añadió.
Tras una entrevista entre el presidente francés Emmanuel Macron y Donald Trump este fin de semana, Francia indicó que esperaba “suspender” este año el cobro del impuesto para evitar sanciones estadounidenses pero también para dar más tiempo para encontrar un acuerdo comercial dentro de la OCDE.
Las negociaciones auspiciadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para encontrar un encuentro intencional serán sin embargo difíciles.
“Hay un proceso en la OCDE y vamos a participar”, dijo por su parte Steven Mnuchin, sin más detalles. Francia cree que la propuesta estadounidense de impuesto “opcional” se puede estudiar.