La Audiencia Nacional de España divulgó este martes la razón por la que decidió no extraditar al mayor general Hugo “El Pollo” Carvajal, quien está señalado por Washington de cometer supuestos delitos de narcotráfico.
A su juicio, la reclamación de las autoridades estadounidenses “se fundamenta en una motivación política por su condición de exdirector de los Servicios de Inteligencia Militar durante las presidencias de (Hugo) Chávez y (Nicolás) Maduro, dentro de la estrategia política estadounidense respecto a Venezuela”.
La sentencia, en la que se explican los motivos, la Sección Tercera de la Audiencia Nacional reprocha a EEUU que no concreta los cargos contra Carvajal y que solo se basa en una declaración jurada de un miembro de la agencia estadounidense antidrogas (DEA).
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Esto, indica, no es suficiente para acusarle, ya que el agente de antidroga achacó a Carvajal “una conducta abierta, abstracta e inconcreta en tiempo, lugar y actos”.
En su resolución, el tribunal presidido por el magistrado Alfonso Guevara cree además que la actuación de Carvajal se enmarcó en todo momento dentro de sus funciones como militar, por lo que habría incurrido si acaso en un delito militar, causa obligatoria de rechazo de la entrega según el tratado de extradición entre España y EEUU, resaltó EFE.
Este país, basándose en la declaración de ese agente especial de la DEA, le atribuye delitos de “narcoterrorismo” por ser parte de una “estrategia dirigida desde la Presidencia de la República” de Venezuela, con la cooperación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), para introducir en Estados Unidos “grandes cantidades de cocaína”.
El agente de la DEA afirmaba en su declaración que Carvajal, el expresidente Hugo Chávez, el vicepresidente económico de Venezuela, Tareck el Aissami (también reclamado por EE.UU. por narcotráfico), y el presidente de la cuestionada Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello, trabajaban con los cabecillas de las FARC coordinando actividades de tráfico de drogas en Venezuela y Colombia como “arma contra los Estados Unidos”.
Para reforzar su tesis de que actuó como militar y por tanto no puede ser extraditado, la sala afirma que, en todo caso, “la protección armamentística y de inteligencia a los narcotraficantes de las FARC” por parte de Carvajal “no se puede desligar” de su cargo de director de la inteligencia militar.
Y de cualquier manera insiste en que EEUU “no precisa qué actos concretos de carácter delictivo” llevó a cabo Carvajal, que fue director de la contrainteligencia de 2004 a 2011 con Chávez y de 2013 a 2014 con Maduro, luego cónsul de Venezuela en Aruba y desde 2016 es miembro de la Asamblea Nacional (AN).