Colombia acusa a Maduro de querer “desviar la atención” con nueva denuncia de magnicidio

MOSCÚ (RUSIA), 03/06/2019.- El ministro colombiano de Exteriores, Carlos Holmes Trujillo. EFE/ Maxim Shipenkov

El canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujilo, desestimó las acusaciones que hiciera este miércoles el mandatario Nicolás Maduro, sobre un supuesto nuevo plan para asesinarle, que estaría encabezado  por el expresidente, Álvaro Uribe Vélez, el embajador de la nación neogranadina en Estados Unidos, Francisco Santos.

De acuerdo con el venezolano, ambos funcionarios colombianos han discutido la estrategia con el coordinador internacional para la ayuda humanitaria de Venezuela, designado por el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, y reconocido por más de 50 países como presidente encargado de la nación sudamericana actualmente en crisis.

“Álvaro Uribe Vélez, Francisco Santos y Léster Toledo, lo han discutido en el búnker en la casa donde vive Álvaro Uribe Vélez”, reiteró Maduro en cadena obligatoria de radio y televisión.

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A través de su cuenta en Twitter, Holmes Trujillo rechazó las denuncias, a las que calificó como “calumnias” y que considera tienen como fin “desviar la atención” de la situación venezolana.

“Calumnias del dictador Maduro tienen como fin distraer la atención de la grave crisis en la que tiene a Venezuela, y de las repudiables violaciones a los DDHH de su régimen, sobre las cuales dio cuenta la señora Michelle Bachelet”.

Maduro ha denunciado cerca de 30 planes magnicidas en su contra desde que asumió el poder en 2013.

El 4 de agosto de 2019, al cumplirse un año del fracasado magnicidio en su contra, Maduro reiteró sus acusaciones al “Estado fallido” de Colombia por su responsabilidad en supuestas “conspiraciones”.

Por el caso, detuvieron y señalaron al diputado opositor, Juan Requesens, de participar en ese atentado, bajo un proceso arbitrario y amañado, de acuerdo a denuncias de sus abogados.

Además, el parlamentario y dirigente, Julio Borges, actual representante de Guaidó en el Grupo de Lima, también fue involucrado en el supuesto complot; así como el concejal, Fernando Albán, quien murió en extrañas circunstancias cuando se encontraba detenido en la sede de la policía política que dirige Nicolás Maduro.