Autoridades españolas detuvieron el 25 de junio en el aeropuerto de Sevilla a un militar que viajaba en el avión de reserva del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, por presunto narcotráfico.
El sargento implicado en el caso fue interceptado con una maleta que contenía 39 kilogramos de supuesta cocaína, repartidos en 37 paquetes. El vuelo fue registrado como si se tratara de un vuelo convencional y en él se encontraron los estupefacientes, según señaló EFE.
El hecho se dio a conocer luego del control policial, cuando el avión se encontraba en España haciendo escala. El detenido está custodiado por la Guardia Civil mientras espera pasar a la disposición judicial por atentar contra la salud pública.
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El militar se encontraba en el avión que acompañaba a Bolsonaro para la Cumbre del G20 en Japón. Ambas naves llegarían al país asiático este miércoles 26 de junio.
Fuentes brasileras aseguraron que se trata de un sargento del Ejército del Aire, quien viajaba como oficial al mando en el vuelo. Se trataba de la nave Embraer 190, del Grupo de Transportes Especiales de la Fuerza Aérea.
La reacción de Bolsonaro
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se pronunció ante el hecho. Mediante una publicación en su cuenta de Twitter, el mandatario resaltó que fue informado por el Ministro de Defensa.
Asimismo, declaró que tendrían la inmediata colaboración con las fuerzas de seguridad de España, así como la entera cooperación para esclarecer el caso.
“La Fuerzas Armadas (brasileñas) tienen un contingente de cerca de 300.000 hombres y mujeres formados en los más íntegros principios de la ética y moralidad”, aseguró Bolsonaro.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) June 25, 2019
Adicional a ello, añadió que “si se demuestra la participación del militar en este crimen, el mismo será juzgado y condenado”.