El candidato presidencial argentino Alberto Fernández dijo el miércoles 9 de julio que el fiscal Alberto Nisman, quien fue encontrado muerto en su residencia, le dijo que tenía pruebas contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, aunque “nunca aparecieron”.
Así lo manifestó Fernández tras declarar en el proceso por el pacto que el Gobierno de su correligionaria Cristina Fernández firmó con Irán en 2013. El candidato y exjefe del Gabinete de Ministros de la exmandataria, fue llamado a declarar como testigo por el juez Claudio Bonadio para que diga lo que sabe sobre ese polémico acuerdo, que Nisman -muerto en extrañas circunstancias- creía pretendía encubrir a terroristas.
“Me preguntaron por declaraciones publicas mías sobre el pacto con Irán. Saben todos que he sido crítico de eso. Saben todos que no estuve de acuerdo con aquella medida (el acuerdo) y que también he dicho una y mil veces que es una cuestión política no judiciable”, expresó.
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Antes de anunciar en mayo de 2019 su “llave” con Cristina Fernández como vicepresidenta, Alberto Fernández estuvo una década alejado de ella y llegó a ser muy crítico con diversos aspectos de su gestión. Había hecho alusión en una entrevista en 2015 a un supuesto “encubrimiento” a través del convenio con Irán.
“Yo lo vi en diciembre a Nisman, cuando me comentó en el supermercado: ‘tengo probado el encubrimiento’. Y yo me reí y le dije, el encubrimiento ya existe, es el tratado, el acuerdo, el pacto, esa es la consumación del encubrimiento”, expresó en una entrevista con el periodista Nelson Castro en el canal TN.
Este miércoles, el candidato presidencial Fernández cuestionó que haya sido citado a declarar solo por haber dado su “opinión” en el pasado y remarcó que aquellas declaraciones fueron una “continuidad” de una charla que previamente había tenido con el mismo presentador en un programa de radio, detalló EFE.
“En ese programa hablé de otras cosas y Nelson Castro me volvió a ese punto. Y lo que había dicho previamente con Nelson Castro es hacer un paralelo entre los cuestionamientos que hacía Nisman y la cuestión política”, remarcó.
El acuerdo con Irán -que en Argentina se declaró inconstitucional y en el país persa no se llegó a convalidar- pretendía establecer una investigación conjunta del atentado en 1994 contra la mutua AMIA de Buenos Aires, que dejó 85 muertos, y cuya autoría está atribuida al grupo Hezbolá y ex altos cargos iraníes.
En enero de 2015, Nisman acusó a Cristina Fernández y parte de su Gobierno de usar ese acuerdo para encubrir a los presuntos terroristas iraníes a cambio de mejorar la relación comercial con Teherán, algo que ella siempre ha negado.
Cuatro días después, el fiscal apareció muerto en circunstancias que aún se investigan y la denuncia que había presentado fue inicialmente desestimada por el juez Daniel Rafecas, aunque volvió a abrirse en 2016.
“Mi mayor cuestionamiento (al memorando firmado) es haber cedido en el pacto la jurisdicción argentina en favor de una comisión internacional formada por cinco personas. A partir de allí, interpreté que eso podía ayudar al encubrimiento de los autores”, argumentó Alberto Fernández a las puertas de los juzgados.
“Nisman alguna vez me dijo además que él tenía una serie de pruebas que nunca aparecieron, y el cuestionamiento que hice en esta charla tiene que ver exclusivamente con el modo en que el juez Rafecas, aplicando lógicas del derecho penal pero absolutamente teóricas, desestimó la denuncia”, completó.
Al ser consultado por una periodista por si su citación fue “una movida más política” -quedan poco más de tres meses para las elecciones presidenciales- el candidato dijo que no hay “dudas”.
Tras la reapertura de la causa en la que se investigan las presuntas irregularidades en el acuerdo con Irán, la exmandataria fue procesada con prisión preventiva, aunque no llegó a ser detenida por tener fueros parlamentarios.
Bonadio envió a juicio oral el caso, que además de a Cristina Fernández afecta a otros exfuncionarios de su gestión.