Autoridades en Filipinas informaron la mañana del 27 de julio que al menos ocho personas murieron y unas 60 resultaron heridas tras registrarse varios sismos de magnitud de entre 5,4 y 5,9 que sacudieron el centro de la isla de Luzón, al norte del país.
Los movimientos telúricos se produjeron antes del amanecer con varias horas de diferencia cerca del municipio de Itbayat, en las islas Batanes, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que registra la actividad sísmica en todo el mundo.
El último temblor, de magnitud 5,7, se registró a 21 kilómetros de Itbayat y a una profundidad de 10 kilómetros, informó la USGS.
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El Consejo Nacional de Reducción de Desastres, además de dar el informe de fallecidos y heridos, pidió a la población de la zona afectada que se mantenga fuera de sus casas para ponerse a salvo de posibles réplicas.
Las autoridades informaron además de que los temblores había causado daños en casas e iglesias y que se había movilizado al ejército para llevar a cabo labores de rescate, informó la agencia EFE.
Filipinas se asienta sobre el llamado ‘Anillo de Fuego del Pacífico’, una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría moderados.
Seísmos de magnitud superior a 5 se registran de manera esporádica en el sur de Mindanao, Batanes y la región oriental de Bicol.
