El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, regresó a Venezuela en medio golpes, empujones e insultos entre sus seguidores y partidarios del régimen de Nicolás Maduro, que se agolparon en el aeropuerto Internacional Simón Bolívar.
El líder opositor arribó al país sobre las 17:00 horas en medio de la incertidumbre que tendría su regreso tras una gira internacional de 23 días en donde varios países le ratificaron su apoyo como presidente encargado de Venezuela.
En ese sentido, el aeropuerto internacional de Maiquetía, que sirve a la capital Caracas, se convirtió en un punto de concentración cuando se confirmaba el retorno de Guaidó, quien viajó desde Portugal en un vuelo comercial de la aerolínea TAP.
“Traigo el compromiso del mundo libre, dispuesto a ayudarnos a recuperar la democracia y la libertad. Empieza un nuevo momento que no admitirá retrocesos y que nos necesita a todos haciendo lo que nos toca hacer”, escribió Guaidó en su cuenta de la red Twitter.
Su última parada conocida fue Estados Unidos, donde lo recibió el presidente Donald Trump, quien le prometió “aplastar” a la “tiranía” de Maduro.
El político, de 36 años, había abandonado el país clandestinamente el pasado 19 de enero, pues tiene una prohibición de salida por varias procesos judiciales en Venezuela, pero este martes confirmó su regreso al país publicando una foto frente a un funcionario de migración.
Apenas salió de la terminal aérea, cerca de 200 personas cercanas del chavismo agredieron al líder político y su esposa Fabiana Rosales, así como a los diputados opositores que fueron a recibirlo.
Varios periodistas también fueron agredidos y asaltados por el grupo de chavistas frente a decenas de agentes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), que no impidieron estos actos.
En medio de este altercado y tras recibir varios golpes, la comitiva de Guaidó logró subir a un vehículo y abandonar la zona.
Movilización
Con una camisa blanca y un crucifijo de madera colgando en el pecho, el opositor, se abrió paso rodeado por escoltas durante las escaramuzas, en las cuales fueron agredidos diputados opositores y periodistas.
Antes, en la zona de desembarco, fue rociado con una gaseosa por una empleada de Conviasa, la aerolínea estatal sancionada el pasado 7 de febrero por Estados Unidos. “Este showcito era precedible”, se escucha decir a Guaidó, riendo, en un video difundido en redes sociales.
“¡Guaidó fascista, gusano imperialista!”, ¡asesino!”, le gritaban trabajadores de Conviasa tras irrumpir en el área donde legisladores y diplomáticos lo esperaban.
Guaidó retornó a Venezuela luego de violar por segunda vez la prohibición de salida del país. Su procedencia se mantuvo en secreto hasta último momento.
Durante su periplo, el jefe del Parlamento visitó Colombia, varios países europeos, Canadá y Estados Unidos, y adelantó que convocará a una “gran movilización”.
Bloqueo de vías
Washington, principal aliado de Guaidó, ha advertido al gobierno de Maduro que cualquier acción contra él tendrá consecuencias.
El número dos del chavismo, Diosdado Cabello, adelantó el lunes que “no va a pasar nada” tras la gira, a la que tildó de “paseo turístico”. “Él es la nada”, ironizó el presidente de la oficialista Asamblea Constituyente, que en la práctica tomó las funciones del Poder Legislativo.
El equipo de prensa de Guaidó denunció en un comunicado el bloqueo de las vías hacia el aeropuerto “para impedir” la llegada de representantes del cuerpo diplomático y de parlamentarios. Diputados se bajaron de autobuses donde eran trasladados y completaron su recorrido a pie.
“En una acción intimidatoria los componentes militares han desplegado en la capital venezolana y en los alrededores del aeropuerto escudos antimisiles para promover zozobra”, apuntó el texto.
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) denunció agresiones contra reporteros.