En la actualidad son muchas las mujeres que tienen carreras o trabajo fuera de su casa, al que tienen que dedicarle gran parte de su tiempo; sin embargo, otras tantas deciden ser mamá y quedarse en sus casas para dedicar tiempo completo a la crianza de sus hijos.
Aunque muchas personas todavía creen que las tareas domesticas son menos arduas que un trabajo de oficina o algo parecido, la realidad es que las madres hacen un trabajo maravilloso al encargarse de sus hijos y los oficios del hogar; por lo tanto merecen el mismo merito.
Tomando en cuenta no solo su situación, sino la de muchas madres en el mundo, una mujer llamada Bridgette Armstrong, publicó a través de su cuenta en Facebook, una emotiva fotografía del momento cuando rompió en lágrimas y escribió un texto sobre lo solitario y abrumador que puede ser dedicarle todo su tiempo a un niño.
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Armstrong es madre de Riley, un pequeño con el que lleva una rutina que algunas veces la hace sentir tan sola como presionada.
“Todo el mundo piensa que ser una estancia en casa mamá a tiempo completo es fácil”, comenzó el texto, luego continuó; que tengamos suerte de poder no tener que trabajar, que somos perezosos, que no sea trabajo “real” así que no tenemos nada de qué quejarse.
Pero lejos a lo que muchos piensan ser mamá a tiempo completo no es tarea fácil, “es solitario y abrumador. No puedes hacer nada sola; ir al baño, tomar una taza de café, leer, ni siquiera puedes limpiar la caca de tus pantalones por tercera vez en el día sin que alguien llore o grite en tus piernas. No tienes descansos a menos que los niños estén dormidos; y ese tiempo lo usas para limpiar”.
Una madre no dedica solo parte de su tiempo a los hijos, dedica prácticamente todo su tiempo; “luchas por encontrar formas de entretener a alguien literalmente 12 horas al día todos los días. Llevas la misma ropa que huele a sudor y lágrimas por días a la vez porque ya está manchada y no sirve arruinar más ropa”.
La madre también reveló que sentía envidia de esas mujeres que trabajaban fuera de sus casas, “miras a las madres trabajadoras y te pones celoso porque desearías tener una excusa para tener una conversación adulta sin ser interrumpido”.
“Yo era una persona que juzgaba a las madres de tiempo completo, pero ahora las entiendo. Quienes dijeron que estarían allí para ayudar desaparecieron y te quedas con una abrumadora sensación de fracaso”.
La mujer de 25 años ha querido enviar un mensaje claro, es importante que las madres tengan apoyo de otras personas; que le ofrezcan su ayuda y sean capaces de darle compañía, aunque sea por un rato.
“Quiero que la gente se dé cuenta de que ser mamá, aunque puede ser un privilegio poder criar a nuestros hijos a tiempo completo, también puede ser difícil, y está bien hablar de ello sin sentirse mal”, concluyó durante una entrevista para Today.
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