Wallace o mejor conocido como ‘Pala-pala’, es un joven brasilero que demuestra la importancia de reciclar, para ayudar a quienes lo necesitan. Este estudiante de servicio social en Río de Janeiro, tiene una asombrosa labor no solo para ayudar a los animales, también al medio ambiente.
Este joven convierte bolsas de alimentos usadas en increíbles bolsas de reciclaje, ideales para dejar a un lado el uso de plástico. Luego las vende y con el dinero que recauda alimenta a perros y gatos sin hogar. “Este proyecto comenzó cuando vi a los perros y gatos a menudo olvidados en las calles sin comida, me rompió el corazón, están más indefensos”, comentó Wallace.
La importancia de reciclar
La técnica utilizada por Wallace es el upcycling o supra-reciclaje, que no es lo mismo que simplemente reciclar, ya que el reciclaje utiliza materiales como plástico, papel, metal y vidrio para descomponerlos y obtener un nuevo producto. Mientras el supra-reciclaje utiliza el mismo material justo como comenzó, aprovechando prácticamente toda la cantidad en el artículo final.
‘Pala-pala’, comparte su proyecto de reciclaje en redes sociales, donde además explica que se trata de; ‘’tomar algo que ya no está en uso y darle una segunda vida y una nueva función. Al hacerlo, el producto terminado a menudo se vuelve más práctico, valioso y hermoso de lo que era antes”.
Aunque no tiene ayuda o asociaciones con grandes empresas, Wallace, con apoyo de su hermana se encarga de llevar a cabo el proyecto con sus propios recursos; esperando que otras personas se unan a esta hermosa iniciativa de ayudar a los más necesitados.
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El supra-reciclaje es una forma de recaudar fondos
Gracias al proyecto de reciclaje llamado ‘Sostenibilidad’, Wallace logra recaudar fondos para la compra de medicamentos y alimentos para los animales que viven en la calle en las regiones de Bangu y Padre Miguel en Río de Janeiro, Brasil.
Las bolsas tienen un valor aproximado de cuatro dólares, con las ganancias el joven compra alimentos, medicamentos y paga las consultas veterinarias de muchos peluditos abandonados.
Wallace se dio cuenta de la importancia que tenía reciclar, luego de participar en un grupo de voluntarios que preparaban sopa para personas sin hogar y alimentos para animales, entendiendo que para mantener este tipo de ayudas era necesario buscar mejores formas de generar ingresos.
Wallace se encarga de recolectar las bolsas de alimentos, la producción y la costura de las bolsas, incluso realizan morrales, los cuales vende para recaudar fondos. La idea del joven es que otras ONG participen en esta hermosa iniciativa. Otra manera de colaborar con este proyecto de reciclaje es donar bolsas de alimentos para la creación de más bolsas ecológicas.
La importancia que tiene reciclar para Wallace va más allá de ayudar solamente a los animales “También ayudo a las personas sin hogar que sabemos tienen hambre. Para ellos hago diferentes pedidos de 1 kg de comida en otros hogares. De esta manera se ayuda a nuestros amigos que viven en las calles, incluso cuando no tengo forma de ayudar, rezo por ellos”, finaliza.
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