La campaña de Joe Biden amenazó el viernes con “expulsar” a Donald Trump de la Casa Blanca si el presidente de Estados Unidos se niega a admitir la derrota en la elección presidencial.
El candidato demócrata ya tendría asegurada su estadía en la Casa Blanca luego de que este viernes tomara la delantera en el conteo de votos en estados clave para la elección como Pensilvania y Georgia.
Sin embargo, las declaraciones de Donald Trump han evidenciado que el actual mandatario estaría decidido a desafiar el veredicto de las urnas.
A pesar de que aún no se ha declarado un ganador oficialmente, el conteo de votos siguen en cinco estados clave en donde Biden tienen grandes posibilidades de ganar.
“Los estadounidenses decidirán el resultado de esta elección. Y las autoridades estadounidenses son perfectamente capaces de expulsar a los intrusos de la Casa Blanca”, indicó Andrew Bates, portavoz de la campaña de Biden.
En un recuento que avanza lentamente, la tendencia se revirtió a primera hora de la mañana en donde el exvicepresidente demócrata ahora está por delante del presidente republicano por una pequeña ventaja.
Si el exvicepresidente de Barack Obama gana en Pensilvania, se convertirá en el 46º presidente estadounidense el próximo 20 de enero, independientemente del resultado del conteo en los demás estados.
Pero Donald Trump volvió a mostrar su descontento y agitar el fantasma de un fraude el jueves, sin agregar nuevos elementos para apoyar su declaración.
Elecciones en litigios
Ante la posibilidad de perder la elección por un estrecho margen en varios estados, el presidente Donald Trump podría verse en la alternativa de pedir a la Corte Suprema que descarte los votos en dos o más estados para impedir que Joe Biden asuma la presidencia.
Es una situación muy distinta que en la disputada elección presidencial de 2000, que fue resuelta efectivamente por la Corte Suprema. En ese caso el enfrentamiento era en torno a los votos de Florida, con un recuento en oposición a tratar de detener el conteo inicial.
La campaña de Trump y los republicanos ya están presentando demandas en varios estados, aunque la mayoría son de escala menor y afectan pocos votos.
Los jueces en Georgia y Michigan desestimaron rápidamente las demandas de la campaña el jueves, lo que socavó la estrategia de atacar la integridad del proceso de votación en estados donde el resultado podría ser adverso al presidente.
Mientras tanto, Biden se acercaba lentamente a los 270 votos en el Colegio Electoral, el mínimo necesario para llegar a la Casa Blanca.
Trump y su campaña prometieron más demandas, con denuncias infundadas de fraude electoral ante lo que sería la inminente elección de Biden como presidente.
En un discurso el jueves en la sala de conferencias de la Casa Blanca, el presidente recitó una serie de denuncias, sin presentar pruebas, asegurando que los demócratas intentaban privarlo ilegítimamente de un segundo período.
“Pero creemos que habrá muchos litigios porque no podemos permitir que roben una elección de esta manera”, aseguró Trump al insinuar que la decisión final podría quedar en manos de la Corte Suprema.
Un abogado de la campaña de Biden indicó que las demandas carecían de mérito, obedecían a una estrategia más política que legal y no tendría ningún efecto en la elección del demócrata
“Quiero destacar que para sus fines estas demandas no necesitan tener mérito, eso no es lo que buscan … lo que buscan es enviar mensajes falsos sobre lo que sucede en el proceso electoral”, aseguró el abogado Bob Bauer, al asegurar que Trump ha denunciado irregularidades y un fraude sin ningún fundamento.
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