Florida planea una reapertura – gradual- el próximo 4 mayo. Pero, quedarán exentos los condados del sur: Miami-Dade, Broward y Palm Beach, que han sido los más afectados por el coronavirus, informó el gobernador Ron DeSantis.
El gobernador informó en una comparecencia ante los medios en Tallahassee, la capital estatal, sobre cómo Florida va a hacer para ir regresando a la normalidad de una “manera inteligente, segura y paso a paso”.
En la Fase Uno se relajarán la mayor parte de las medidas que restringían la actividad económica y fueron incluidas en el decreto de confinamiento que entró en vigor el 1 de abril. Un mes después del primer caso confirmado de COVID-19 en el estado, que a día de hoy tiene 33.193 casos y 1.218 muertes.
No obstante, se mantendrá la obligatoriedad del distanciamiento físico de seis pies (1,82 metros) entre personas y la prohibición de reunirse más de diez personas.
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Salvo cines, bares, gimnasios, peluquerías y otros establecimientos de servicios personales, todos los negocios podrán abrir sus puertas en Florida a partir del 4 de mayo, aunque algunos deberán funcionar con determinadas restricciones.
Abrirán marina, parques y canchas de golf en los condados excluidos
En los tres condados que quedan fuera de la Fase Uno, este miércoles, para consuelo de sus habitantes, abrieron algunos parques públicos, marinas y campos de golf.
Con las mascarillas puestas y guardando la distancia de seguridad, salvo en algunos momentos en que la gente se agolpaba, se vio a los habitantes de Miami-Dade, Broward y Palm Beach disfrutar de un día caluroso y soleado.
La prueba de fuego se producirá este fin de semana cuando se espera que numeroso público disfrute de unos lugares de esparcimiento que hasta ahora les estaban vedados.
Bajo esa orden Florida comienza su reapertura, donde antes se podía salir a la calle a caminar y hacer ejercicio pero no a practicar deportes como el golf que goza de gran popularidad en el sureste de la entidad.
EFE