Una pareja de ancianos cumplió 70 años de estar juntos y lo celebraron al vestir la ropa con la que contrajeron las nupcias. La historia ha conmovido al mundo y se hizo viral a través de una sesión fotográfica tomada por su nieta.
Melvin (de 92 años) y Nancy Lubbers (de 87 años) se casaron en 1952 y para recordar el amor que los unió participaron de la romántica sesión de fotos usando los trajes que lucieron el día de su boda.
Nancy se casó cuando era apenas una adolescente de 16 años con quien sería el amor de su vida, y el ahora padre de sus cinco hijos.
MN + SD WEDDING PHOTOGRAPHER (@anna.behning)Su traje de encaje blanco le costó apenas 35 dólares en aquella época y ahora lo ha desempolvado para ser fotografiada por el aniversario de su boda.
Su nieta más joven los ha convencido para la sesión de fotos y como un regalo por sus varias décadas juntos. Anna, quien es fotógrafa de boda profesional, ha visto en sus abuelos la oportunidad eternizar su amor desde el jardín de su casa, en Dakota del Sur, Estados Unidos.
“Mis abuelos solo tienen un par de fotos del día de su boda. Y se me ocurrió la idea de tomar fotos de la abuela con su vestido y luego mi madre, Melissa, encontró el traje del ejército de la guerra de Corea del abuelo para que lo usara”, dijo Anna, según recoge el Daily Mail.
Ambos se conocieron en una pista de patinaje y poco tiempo después Melvin le propuso matrimonio en un estadio de béisbol; ahora, la pareja tiene 12 nietos y 21 bisnietos.
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“Realmente fue un honor que todavía pudiera ponerme eso”, dijo Nancy, al tiempo que explicó que su vestido era especial “y me encantaba, así que lo preservé y lo conservé todos estos años”.
Ahora que se lo ha vuelto a poner dijo haberse sentido “muy bien usarlo de nuevo. Nos divertimos recordando el día de nuestra boda y la sesión de fotos fue muy divertida”.
Su esposo ha dicho que le trajo buenos recuerdos verla de nuevo con su vestido de boda.
También han recordado que no pudieron tener una luna de miel como se merecían porque Melvin fue llamado para alistarse en el servicio luego de la boda.
El recién casado tuvo que irse durante cuatro meses a un entrenamiento básico y recuerda que recibió un permiso para estar por escasos 10 días en casa. Pero pronto sería enviado a Japón para prepararse y poder luchar en Corea donde estuvo ocho meses sirviendo para su país.
Después de la guerra, Melvin trabajó como vendedor y tenía una granja de ovejas como pasatiempo. Nancy, por su parte, trabajaba en una tienda de comestibles y crio a los cinco hijos de la pareja.
Su “secreto”
Cuando le preguntaron por su secreto para tener un matrimonio exitoso y feliz, respondieron que aunque las parejas no siempre estarán de acuerdo con algo, es mejor hablarlo y encontrar una respuesta.
“Y una vez que se resuelva, no lo vuelvan a mencionar”, dijo Melvin. Nancy por su parte, completó: “Respétense siempre, incluso cuando no estén de acuerdo. Muestren mucho amor y cuidado. Perdonen y olviden”.
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América Digital
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