Valentino Labra es un niño argentino de cinco años que nació con displasia diastrófica, un trastorno poco frecuente caracterizado por talla baja con extremidades cortas y malformaciones de las articulaciones.
A pesar de su condición, este pequeño y sus padres se han convertido en una gran ejemplo de resiliencia frente a la vida y su historia lo ha convertido en toda una celebridad en las redes.
Valu, como le dicen al pequeño, cuenta con más de 38 mil seguidores solo en Instagram, en donde trata de compartir contenido que contagia de felicidad y buen humor.
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Su popularidad comenzó durante la pandemia del COVID-19 cuando sus padres, Milagros Lapuyade (24 años) e Ignacio Labra (25) comenzaron a crear contenido en TikTok, subiendo videos de la cotidianidad de su vida en la que se les ve muy espontáneos y divertidos compartiendo como familia.
Valentino, un niño muy feliz
Este pequeño niño tiene una energía arrolladora. En las redes siempre se le ve con una sonrisa y siendo muy ocurrente y original en sus poses para las fotos.
El diario El Clarín, que tuvo la oportunidad de entrevistar a sus padres, lo describe como un niño feliz, con carácter e independiente y que lleva la vida de cualquier niño de cinco años.
“Es super positivo y está alegre todo el día”, dijo su papá al diario; mientras su madre añadió entre sonrisas que “Él maneja todo. Si no le gusta algo, te lo dice sin vueltas.
Además, el pequeño tiene grandes habilidades para hablar a pesar de su su corta edad y en sus conversaciones logra sacarle más de una sonrisa a las personas.
Actualmente Valu recibe terapias para tratar su displasia diastrófica, así como estimulación por parte de sus padres, quienes lo aman, apoyan y motivan sobre todas las cosas. El pequeño también se está formando en la escuela.
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Valentino es famoso en las redes sociales
Los padres de Valentino se enteraron de la enfermedad de su hijo cuando tenía apenas 15 días de nacido, aunque cuatro semanas antes de su nacimiento los médicos advirtieron que algo no andaba bien, reseñó El Clarín.
“Valu estaba pesando un kilo y medio, entonces, el médico pensó que algo no andaba bien con la placenta. Me mandó a hacer otra ecografía y ahí se veían las extremidades cortas, pero tampoco es que se veía bien porque estaba sentado y de perfil; por lo que solo se podía medir un brazo y una pierna. Nos dijeron que hasta que no naciera no iban a saber qué era lo que sucedía”, contó la madre del niño.
Estas palabras les generó una gran incertidumbre y cuando Valentino nació los médicos fueron identificando que el pequeño podría estar sufriendo de displasia diastrófica; de la cual solo habían cuatro casos en el país para ese momento.
Pese a ese diagnóstico, Valu vive una vida tranquila, llena de amor y felicidad junto a su familia. Recientemente fue abanderado, llevando la bandera de su país y en sus fotos se le ve disfrutar del momento.
Del mismo modo, en su publicaciones se le puede ver disfrutando de paseos y aventuras juntos a sus padres, participando en eventos y disfrutando la etapa propia de un niño de su edad.
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