René Farrait y Ray Reyes, exintengrantes de la agrupación Menudo, han lanzado fuertes críticas a la nueva serie ‘Súbete a mi moto’. La producción aborda los inicios, el ascenso a la fama y el declive de la banda, a partir de los relatos del mánager del emblemático grupo, Edgardo Díaz.
Ahora a René y Ray se suma Jonathan Montenegro, uno de los jóvenes que participó en Menudo y quien reveló su perspectiva ante lo vivido hace casi 30 años.
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El artista venezolano es uno de los cuatro integrantes que renunciaron a Menudo en 1991, luego del escándalo que protagonizaron sus compañeros Sergio Blass y Rubén Gómez cuando les encontraron sustancias psicoactivas en el aeropuerto de Miami.
En el programa mexicano ‘Ventaneando’, Montenegro habló de algunos momentos que le tocó presenciar durante su estadía en el grupo, el cual hoy vuelve a ser recordado gracias a la serie de Amazon Prime.
Jonathan Montenegro, exintegrante de Menudo, afirmó que sufrió maltratos durante su participación en la agrupación
Jonathan afirmó que tuvo que pasar situaciones de violencia, y relató una amarga experiencia que vivió con el manager de la agrupación.
El exMenudo aseguró que el creador del grupo, Edgardo Díaz, usaba la violencia física como medida de disciplina al interior de la agrupación.
“Cuando uno es niño, uno no está claro de cuáles son sus derechos. Presencié gritos y momentos violentos con alguno de los integrantes de mi generación; yo lo vi, nadie me lo contó…”
“Recuerdo una noche que tuve que encerrarme en el baño porque vi cómo mi otro compañero fue golpeado por una tontería (…) ese fue mi primer momento de mucho miedo, de mucho temor porque tenía tan solo 11 años”, afirmó Jonathan Montenegro.
El cantante asegura que su salida del grupo, posteriormente del incidente por posesión de drogas de sus compañeros, fue por “razones psicológicas, emocionales y económicas”, motivo por lo que él y su familia decidieron abandonar el exitoso proyecto.
Además, el venezolano aseguró que para quienes manejaban la agrupación era más importante cumplir con los compromisos que velar por la salud de los integrantes.
“Hubo situaciones que no eran justificables, como por ejemplo, yo tuve hepatitis y yo tuve que trabajar igual enfermo, y entendemos perfectamente que el hígado se te puede explotar si no tomas las medidas respectivas, pero también a su vez comprendía que teníamos una agenda muy importante que no podías detener (…) teníamos que trabajar en muchas ocasiones indispuestos porque nuestra salud estaba delicada”, agregó Jonathan Montenegro.