La belleza que atesora Jennifer Lawrence no se puede negar, sin embargo, detrás de esa cara bonita se esconden algunos secretos vinculados con ciertos comportamientos que sus compañeros de trabajo en ocasiones no logran tolerar.
Todas las personas tienen conductas que no comparten con todo el mundo y las reservan para la intimidad de su hogar. No obstante, parece que esta talentosa actriz de Hollywood no se guarda algunas excentricidades con sus compañeros de labores.
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Comportamientos extraños de Jennifer Lawrence
Ajo antes de besar
Lo último que un actor quiere ganarse es la fama de tener mal aliento, aunque todo parece indicar que Jennifer lo hace de forma intencional y es que antes de grabar escenas románticas de besos ella opta por darse un banquete con su condimento favorito: ajo.
Motivado a ello, el actor Liam Hemsworth llegó a confesar que odiaba besarla en el set de rodaje debido a su intencional y desagradable mal aliento.
“Cuando teníamos una escena con beso, ella comía ajo o atún y justo antes de comenzar a rodar me decía: comí ajo y no me lave los dientes”, comentó en ‘The Tonight Show’ de Jimmy Fallon.
Tics nerviosos
La joven oscarizada también desborda energía, tanto que no deja de mover su cuerpo. Así lo explicó su compañero Josh Hutcherson.
“Ella me pone muy nervioso porque mueve mucho la pierna como si fuera un tic nervioso. ¡Deja de hacerlo!”, dijo Josh en ‘Entertainment Weekly’.
Bromas y más bromas
Jennifer Lawrence no solo tiene talento para la actuación, también es bastante ocurrente y tiene un humor particular que no todos comparten. Uno de los juegos que le hacía a sus compañeros consistía en tocarles la cara luego de ir al baño.
“Y luego le gusta volver y literalmente poner su mano sobre tu cara… ¿A qué huele esto?”, expresaron Liam Hemsworth y Josh Hutcherson en una entrevista para ‘MTV News’.
Gestos para regalar
Aunque la expresividad es necesaria en la actuación, la rubia se destaca por sus gestos, movimientos de manos y divertidas gesticulaciones.
Sin duda, Jennifer Lawrence es uno de los personajes más alocados de Hollywood y esa naturalidad se ha convertido en su sello personal.