En esta época no hay por qué sentirse mal si usted decide estar a un metro y medio o dos de otras personas. Usted no debería ser visto como un asocial o un desdeñoso ser que odia el contacto humano. Lo más probable es que lo observen como un ganador, como alguien que quiere vencer al coronavirus, un triunfador del tamaño de Usain Bolt.
La exsuperestrella del atletismo, denominado “el hombre más rápido del mundo”, colocó en sus redes sociales la foto del récord mundial que estableció en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, junto al mensaje “social distancing”.
La divertida manera de Usain Bolt es una creativa forma de explicar lo que es el distanciamiento social, una de las armas en la batalla contra el SARS-CoV-2. En la imagen, el jamaiquino le saca poco más de dos metros de distancia al corredor de Trinidad y Tobago, Richard Thompson.
Con esa holgadísima victoria, Usain Bolt paró el cronómetro en 9.69 segundos, lo que era el récord mundial para los 100 metros planos para 2008. No obstante, el tiempo fue derribado el 16 de agosto de 2009 en el Mundial del Atletismo, por el propio Bolt, con 9.58 segundos. Ese cronos se mantiene como la plusmarca mundial.
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Sabemos que muy poca gente sobre la faz de la Tierra puede compararse en carrera silvestre con Usain Bolt que, si bien está retirado, debe ser un corredor más rápido, aunque tenga trasnocho, que gran parte de la población mundial. Sin embargo, sí podemos hacer lo que él hizo con los pobres rivales que vieron su espalda en Pekín 2008, y retirarnos un metro y medio o más de los demás. Esa es una de las maneras de no caer contagiado con la COVID-19 y ser parte de las estadísticas.
Con 33 años de edad, muy joven todavía, con un espíritu alegre, Usain Bolt tiene muchísimo tiempo para disfrutar del legado que dejó en el tartán. No solo tiene el récord mundial en 100 metros, también lo posee en 200 con 19.19 segundos.
Usain Bolt está en el Olimpo de los atletas de todos los tiempos. Seguramente ve todos los días las ocho medallas de oro que logró en tres Juegos Olímpicos.