Lamentándolo mucho el nuevo coronavirus no viene solo: arrastra decesos en todo el mundo y, en diversos ámbitos, se espera que deje secuelas económicas importantes. Algunos ven a la enfermedad como el último aviso para Fórmula 1 y su estado financiero. Una de esas personas es Andreas Seidl, directivo de la escudería McLaren.
El “Team Principal”, cargo de Seidl, estimó que esta es una advertencia para la economía de la categoría reina del automovilismo, la cual tildó como “poco sana y que no es sostenible”, reseñó un reporte de la agencia de noticias AFP.
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“Creo que la crisis que vivimos es el último aviso para un deporte que no está sano y que no es sostenible; y que ahora alcanza un punto en el que necesitaremos cambios drásticos”, dijo Seidl en un encuentro virtual con periodistas.
Las declaraciones, en las que el coronavirus es visto como un aviso para Fórmula 1, llegan después de que McLaren llamara a reducir todavía más el techo presupuestario que deberán respetar las escuderías desde la próxima temporada.
La propuesta de McLaren es que el límite pase de 175 a 100 millones de dólares (de 160 a 90 millones de euros).
“Lo más importante es superar esta próxima gran etapa; pensamos que es absolutamente necesario, teniendo en cuenta todas las pérdidas financieras a las que nos enfrentamos este año”, apuntó Seidl.
El último verdadero aviso para Fórmula 1 es que el campeonato mundial está detenido por la pandemia de COVID-19. Fueron canceladas las nueve primeras competencias del torneo, mientras que algunas fueron aplazadas. La única carrera que continúa en pie en el calendario es el Gran Premio de Francia, el 28 de junio. La válida está en riesgo de ser suspendida.
En la temporada 2019, McLaren, el equipo que representa Seidl quedó en el cuarto puesto de la tabla de constructores con 145 puntos, por debajo del campeón Mercedes (739), Ferrari (504) y Red Bull-Honda (417).
