La aparición de nuevas mutaciones del COVID-19 ha encendido las alarmas de los científicos y autoridades en el mundo, como es el caso de la variación brasileña que ha mostrado, preliminarmente, ser más contagiosa y que tiene a los países de Latinoamérica en alerta.
Los científicos se han concentrado en descifrar los misterios de esta mutación, surgida en el corazón de la Amazonía brasileña, que ya se encuentra en al menos ocho países y que puede ser más infecciosa, aunque todavía se conoce poco de ella.
Los primerio indicios han demostrado que la variante brasileña, bautizada como P.1, sea uno de los factores que están detrás de la explosión de casos de COVID-19 en Manaos (Amazonas) donde los servicios sanitarios se han visto completamente desbordados.
Con un número más alto de mutaciones, también se estudia si la brasileña es más peligrosa que las variantes encontradas en el Reino Unido y Sudáfrica, que son las tres que más preocupan a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) explicó que ya se han identificado casos de este nuevo linaje en otros ocho países además de Brasil: Japón, Estados Unidos, Reino Unido, Colombia, Italia, Alemania, Corea del Sur e Irlanda.
Algunas de estas naciones y otras, como Portugal, Perú y Turquía han suspendido los vuelos procedentes de Brasil ante el temor a la variante P.1.
¿Cuándo apareció la variante brasileña?
La primera voz de alarma la dieron las autoridades japonesas el pasado 9 de enero, después de analizar las muestras de cuatro pasajeros que llegaron una semana antes a Tokio tras viajar una temporada por Amazonas.
Una investigación preliminar de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), centro de investigación médica de referencia en Latinoamérica, indicó que esta nueva variante es un “fenómeno reciente”.
En ese sentido, los expertos aseguran que probablemente se desarrolló en diciembre y evolucionó a partir de variantes del COVID-19 que se encontraban en circulación en Amazonas.
De hecho, en Manaos se han detectado ya cerca de 30 variantes del coronavirus, pero la más inquietante es la P.1, según José Eduardo Levi, investigador del Instituto de Medicina Tropical de la Universidad de Sao Paulo (USP).
¿Por qué sería más contagiosa?
El experto ha explicado que la variante de Manaos acumuló en un breve espacio de tiempo “un número de alteraciones genéticas fuera de lo común”, varias de ellas en la proteína “spike” (espiga), de la que se vale el nuevo coronavirus para entrar en las células humanas e infectarlas.
Los análisis dan cuenta de que se han identificado 12 mutaciones únicamente en esa proteína “spike” de la variante brasileña, tres de ellas preocupan especialmente: K417N, E484K, N501Y.
Esos tres conjuntos de letras y números representan aminoácidos de la “spike”, cuya mutación está asociada a un mayor poder de transmisibilidad. En ese sentido, estas mutaciones ayudarían a que el virus se replique más y que se ensamble mejor con el receptor de entrada de la célula.
“Es como si tienes una puerta, que es la célula, y la cerradura, que es el receptor. Y ahora tienes un virus que abre más fácilmente esa cerradura. Si consigue entrar de forma más fácil aumenta el poder de ser más infecciosa”, explicó Felipe Naveca, virólogo del Instituto Leônidas & María Deane (Fiocruz Amazonía).
Por otro lado, se desconoce si esta nueva variante produce cuadros más graves de la enfermedad pero los médicos han asegurado que el aumento de transmisibilidad ha hecho que cada vez más personas tengan que acudir a los servicios de urgencias tras el contagio.
¿Qué se sabe sobre la reinfección?
Hasta el momento hay un caso confirmado de una persona que contrajo el coronavirus en marzo de 2020 y fue reinfectada por la variante amazónica, a pesar de tener anticuerpos.
“No tenemos cómo afirmar que el virus escapó a los anticuerpos o si bajaron tanto que no consiguieron neutralizarlo. Eso está en estudio”, apunta Naveca.
¿Qué diferencias tiene con la mutación británica y sudafricana?
Los expertos han resaltado que la variante brasileña no surgió a partir de la mutación británica o la sudafricana sino que las tres evolucionaron de manera independiente y surgieron esporádicamente en los tres países, aunque se ha descubierto que algunas de las mutaciones identificadas en la proteína “spike” son las mismas.
“Creemos que son más contagiosas por tener esa mutación en común que aumenta la transmisibilidad”, apunta Levi, virólogo también del laboratorio DASA.
Ver más: Nuevos estudios revelan pistas sobre la mutación británica y sudafricana del COVID-19
De acuerdo con el experto, la variante brasileña podría ser la más “peligrosa”, al menos por el número de mutaciones identificadas en la proteína “spike”: 12 frente a las 8 encontradas en la británica o las 10 de la sudafricana.
¿Qué vínculo tienen con el colapso de Manaos?
Los números dicen que sí, pero no sería la única causa del caos en la capital amazónica brasileña. Las muestras analizadas en diciembre por la Fiocruz detectaron la P.1 en el 51 % de los casos.
Este porcentaje se ha disparado hasta el 91 % en enero, lo que indica que se extiende rápido y se ha convertido en el linaje predominante en Amazonas.
No obstante, a la tragedia de Manaos también han contribuido otros factores. En estos meses hay una mayor circulación de otros virus respiratorios en la región amazónica, como influenza, complementado con un agotamiento social de las medidas de distanciamiento en plenas fiestas navideñas.
Todo ello, unido a la nueva variante y la escasa infraestructura hospitalaria de Amazonas, ha provocado el colapso de su sistema de salud y una escasez de oxígeno para los pacientes graves que podría haber causado más muertes.
¿Podría agravar la pandemia?
Los expertos han alertado que si esta nueva variante se asienta en todo el territorio, lo que ya puede estar ocurriendo, es posible que agrave la delicada situación sanitaria de Brasil al ser más contagiosa.
El exministro de Salud Luiz Henrique Mandetta, quien fue destituido en plena pandemia por el presidente Jair Bolsonaro por defender el aislamiento, alertó que la nueva variante puede provocar una “megaepidemia” en 60 días, si no se toman medidas.
Por el momento, en Brasil, fuera de Amazonas, se han detectado tres casos importados de la variante en el estado de Sao Paulo (sureste), pero el número puede ser mucho mayor.
¿Las vacunas son efectivas?
Los científicos han explicado que varias de las vacunas para el COVID-19 desarrolladas hasta la fecha fueron pensadas a partir de la proteína “spike” del coronavirus.
En este sentido, aquellas que estén basadas puramente en esa proteína, las mutaciones registradas en las variantes británica, sudafricana y brasileña “pueden llevar a una pérdida parcial de eficacia de esas fórmulas”, según Levi.
Sin embargo, los expertos han explicado que todavía no se han publicado estudios de efectividad de las vacunas con la variante brasileña pero han advertido que es crucial contener su propagación para evitar que se vuelva una mutación dominante.