¿Cómo vive el venezolano de a pie con una inflación acumulada de 491%?

El Banco Central de Venezuela (BCV) publicó el informe de la inflación del mes de julio, que indica cómo ésta cerró en 19,6%, mientras que la inflación acumulada se ubica en 491,9%, en un marco de siete años contínuos de recesión económica.

El periodista especializado en la fuente de economía, Víctor Salmerón, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.

“Con un enorme retraso, el BCV actualizó parte de las cifras de inflación. No teníamos  cifras desde el año pasado. Lo que nos muestran estas estadísticas es la realidad del país. Venezuela sigue teniendo una inflación muy alta, que es la mayor del mundo. Las mismas cifras del BCV indican que el precio de alimentos y bebidas no alcohólicas  acumulan en lo que va de año un salto de 505%”, destacó Salmerón.

Hay que tomar en cuenta que las cifras reflejan una inflación menor que la que se tuvo en el mismo período en 2019.

“Durante los primeros 7 meses del año pasado, la inflación acumulada dio un salto de 2200%. Se podría decir que hay una mejoría o una desaceleración, pero para lograr eso la administración de Nicolás Maduro ha hecho que el país pague un precio muy elevado, ya que básicamente lo que ha decidido es a acabar con el crédito. Es decir, la teoría del BCV es que buena parte de la escalada de los precios es porque el dólar aumenta a un ritmo febril. En este sentido, la manera de atajar al dólar es que no haya muchos bolívares para ir a comprar dólares. Esto ha tenido un impacto muy grande porque se ha trancado todo el crédito. Los bancos no pueden prestar dinero y hay una gran contracción de créditos. Por eso el país no ha salido de la recesión desde 2014”, dijo el periodista.

“Es una economía prácticamente muerta, donde nadie está produciendo. Es verdad que la recesión se ha intensificado por el COVID-19 y la necesidad de la cuarentena,  pero la economía venezolana ya estaba en terapia intensiva antes del coronavirus. Es un problema de fondo. Venezuela dejó de ser un país petrolero para pasar a ser un país que solo tiene petróleo bajo tierra. Esto implica que el Estado venezolano ha pasado a ser muy pobre, sin divisas y sin ingresos. Con este panorama es imposible estabilizar la economía venezolana y tener un dólar estable. Podría ser mucho peor si hubiese crédito, pero igual el dólar sigue escalando y el estado no tiene para pagar una pensión decente, por ejemplo”, agregó Salmerón.

El panorama es complicado y las dudas saltan al imaginar cómo es el día a día del venezolano de a pie para adquirir bienes y servicios.

“El día a día de un pensionado que recibe una pensión de 1,3 dólares, que pueden llegar a 5 dólares con los bonos que reparte Nicolás Maduro, depende de la caja CLAP, que solo tiene granos, pasta, arroz y aceite. El venezolano de a pie desayunan harina, almuerzan arroz con garbanzo y vuelven a cenar lo mismo. Esa es la realidad de buena parte de los venezolanos”, expuso el periodista.

América Digital

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