Hay un refrán que dice que “el amor todo lo puede” y es justo esto lo que Camila Acevedo Pérez y Felipe Correa, una pareja colombiana con síndrome de Down les demuestran al mundo. Y es que los novios planean casarse y, ante la falta de dinero para festejar su boda, han realizado hasta rifas y vendido comida.
Su historia ha conmovido a los internautas en las redes sociales, pues la pareja que vive en Medellín, contó que “quedaron flechados a primera vista”, cuando coincidieron en una cita de atención a la discapacidad, reseñó Noticias Caracol.
Felipe de 50 años y Camila de 26 quieren formar juntos la familia que sueñan y sus familiares los apoyan, pues aseguran que, desde que ambos están juntos cambiaron positivamente, incluso, ambos están motivados en estudiar y trabajar. La pareja lleva más de un año de relación.
El padrastro de Felipe, Antonio Cano, contó que ahora ve a su hijastro más “feliz, con interés por seguir viviendo, apegado a la vida, romántico, no ve la hora de llegar a la institución donde estudian, ayuda mucho en su formación. Es más maduro”.
Además, comentó que a pesar de que tanto Felipe como Camila tienen limitaciones para hablar, propias de su condición, se entienden por completo, pues “hablan desde el corazón”.
Por su parte, Miryam, la madre de Camila, también expresó su felicidad por la evolución de su hija, sobre quien dijo que antes no solía ni siquiera socializar y ahora está más contenta y amigable.
“Ella era una persona a la que no le gustaba salir a la calle, no le gustaba ir a misa, no le gustaba compartir con nadie, y ahora está los fines de semana a la carrera organizando todo, organizándose ella, maquillándose, porque se va a ir con Pipe a misa, que a comer helado, que a tomar café”, dijo.
Asimismo, consideró que Camila tiene todo para ser una excelente ama de casa, pues la cocina se le da muy bien.
“Lo único que yo no le dejo hacer son fríjoles, pero desde un arroz hasta un sancocho lo hace ella, le queda delicioso, tiene una sazón único, le va a ir muy bien de esposa porque es muy juiciosa y es muy aseada”, expresó.
Pareja con síndrome de Down se une en compromiso
Su unión ya la evidencian ante todos con un anillo en sus manos como símbolo de su compromiso. Como muestras de amor los novios se escriben cartas y Camila forma un corazón con sus manos para expresarle a Felipe lo mucho que lo ama. Él, por su parte, asegura que una de las cosas que más le gustan de su prometida es lo muy bien que se le da bailar salsa.
Sobre el festejo de su matrimonio, los padres de los novios dicen que no esperan que sea algo sencillo, al contrario, quieren algo por todo lo alto y que ambos recuerden para toda su vida. “Sencillito, no, (queremos) algo que sea bonito y que quede un bonito recuerdo”. Mientras tanto, Camila y Felipe hablan de tener una gran familia.
Para el padrastro de Felipe, aún sin consumar su matrimonio, el amor de su hijastro y Camila “es eterno. Sin necesidad de casarse es eterno porque sale del corazón, es un amor puro, la pureza personificada en ellos dos”.
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