Un equipo de arqueólogos descubrió un nuevo geoglifo en una colina en las misteriosas Líneas de Nazca en Perú que correspondería a la imagen de un gato.
Los investigadores realizaron este hallazgo en una ladera bastante pronunciada y que venía siendo afectada por la erosión natural de este tipo de terrenos, pero se pudo identificar a simple vista a pesar de que está a punto de desaparecer.
“Se realizó la limpieza y conservación del geoglifo, el cual muestra la figura de un felino representado con el cuerpo de perfil y la cabeza de frente, cuyos trazos en su mayor parte estaban bien definidos por una línea de ancho variable entre 30 y 40 centímetros”, indicó el ministerio de Cultura.
De acuerdo con los expertos, la figura mide 37 metros de largo visto en forma horizontal y el cuerpo y la cola se extienden hacia la parte más baja de la ladera.
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Los investigadores también aseguraron que esta figura podría tener más de 2.000 años de antigüedad y este tipo de representaciones de felinos eran frecuentes en la iconografía de la cerámica y los textiles de la cultura Paracas.
“Con este descubrimiento se pone en evidencia, una vez más, el rico y variado legado cultural que alberga la zona, la cual además se encuentra dentro del área inscrita en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO”, indicaron los expertos.
El origen de los sorprendentes geoglifos de las Líneas de Nazca, trazados hace unos 2.000 años, se ha convertido en uno de los grandes enigmas para la humanidad.
Estas imágenes de animales, plantas, objetos y otros dibujos geométricos se encuentran en el desierto de Nazca, en Perú, y sobre ellas han existido varias teorías sobre la forma como fueron talladas por los comunidades ancestrales de la zona, e incluso se ha dicho que fueron obra de los extraterrestres.
La mayoría de estos grabados son tan grandes que se divisan mejor desde el aire y el objetivo de los científicos y expertos ha sido revelar los misterios que han surgido sobre las imágenes y tener respuestas de por qué se dibujaron a tan gran escala y cuál era la razón.
Precisamente, las Líneas de Nazca son una de las más extraordinarias obras de la humanidad y fueron incluidas en la Lista del Patrimonio Mundial en el año 1994 y desde entonces los científicos han venido realizado cientos de estudios para lograr entender su origen.
“Las líneas y geoglifos conforman un paisaje cultural con profundo significado y simbolismo, pues expresan el mundo mágico y religioso de las sociedades prehispánicas Paracas y Nasca, quienes durante más de 1,500 años las dibujaron sobre las arenas del desierto y las montañas”, explicaron.
Finalmente, en los últimos años los científicos han logrado identificar nuevas figuras de animales en esta zona del planeta utilizando distintas tecnologías satelitales y drones, por lo que se cree que aún falta mucho por descubrir sobre esta zona.
En la zona se han identificado unas 300 figuras y más de 10.000 líneas, algunas de 30 metros de ancho y más de 9.000 metros de largo que tuvieron un significado particular para esta cultura milenaria del Perú.
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