Problemas de piel, infecciones, dolor de cabeza y caída del pelo, estos son algunos de los factores que pueden provocarte dolor en el cuero cabelludo.
Cada una de estas características pueden afectar tu salud capilar de tal manera que puedes sentir el cuero cabelludo más sensible y con leve dolor.
A veces, el dolor de cuero cabelludo obedece a peinados muy apretados o el uso de cascos por tiempos prolongados. Sin embargo, cuando tengas el presentimiento de que puede ser por otra razón más preocupante, acude a un especialista.
Por lo pronto, te asomamos de qué se trata esta problemática y sus diferentes causas.
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La dermatitis capilar puede causar dolor en el cuero cabelludo
La dermatitis se deja ver a través de una reacción alérgica que genera enrojecimiento, comezón y descamación en el cuero cabelludo.
En esta etapa puedes observar un poco de caspa y ampollas por el contacto de jabones, cosméticos, y hasta procedimientos estéticos.
Solución: trata el dolor de cuero cabelludo aplicándote champús que contengan zinc, ketoconazol y ácido salicílico. Cualquiera de ellos puedes comprarlos en la farmacia más cercana, pero si no mejoras al poco tiempo, acude a un experto en dermatología.
Infecciones en el cuero cabelludo
No solo la piel del cuerpo es propensa a sufrir de infecciones, también los folículos del pelo están expuestos a la proliferación de bacterias, hongos y vellos enterrados.
Este tipo de escenarios ocurren cuando tienes un diagnóstico de piel delicada. No obstante, si eres diabética o cuentas con un sistema inmune débil, podrías sufrir en algún momento de este tipo de lesiones que causan inquietud en el cuero cabelludo y hasta caída del pelo.
¿Qué puedes hacer? En este caso, utiliza champús antimicóticos, te ayudarán a sanar y tu cabello crecerá sin problemas.
Dolor de cabeza
Cuando tienes una carga elevada de estrés, depresión o ansiedad, se activa una presión en la cabeza que puede causar migraña, y con ella dolor en el cuero cabelludo.
No siempre sucede, pero a veces, la tensión muscular es tan fuerte que si no es atacada a tiempo, el malestar cobra fuerza o se mantiene.
Qué hacer: toma los analgésicos y antiinflamatorios sugeridos por tu especialista. El Paracetamol y el Ibuprofeno son una de las cápsulas más populares para acabar con esta inquietante dolencia.
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